VALENCIA. Que la Generalitat apuesta por la transparencia y por dejar claras las buenas conductas que debe de adoptar el personal de la administración es una filosofía del actual Consell. Hasta ahora, la valenciana es una de las comunidades autónomas en España que más destaca en la aplicación de un régimen de transparencia an la administración. La directora General de Transparència i Participació Ciutadana de la Generalitat Valenciana, Aitana Mas, explico este jueves en un taller sobre el portal de Transparencia los avances que se han hecho para dar una información más accesible a medios y ciudadanos.
Entre las novedades, la inclusión de una mayor criba para recorrer la algunas veces polémica caja fija, que según explicó Mas, Hacienda está regulando para ajustar mejor los gastos. La Conselleria de Transparencia, en honor a su nombre, también ha hecho público el borrador del nuevo decreto que regulará el Buen Gobierno en la toda la Generalitat, concretamente en el área del portal de transparencia donde debería estar publicada la normativa en fase de tramitación de todas las Consellerias -y que de momento no está albergada en esta nube-.
El mirar cerca es uno de los focos que se marca este Gobierno, por lo que entre las prácticas del borrador se recomienda favorecer al producto valenciano o al menos que sea de comercio justo. ¿Cómo? Instando a que sean utilizados en recepciones y actos públicos. Para ello, propone a los órganos competentes promover convenios de colaboración con empresas o entidades con el fin de priorizarlo y ajustar precios, siempre respetando la normativa de contratación.
Respeto contra la violencia, igualdad de mujeres y hombres, compromiso con la lengua propia y aconfesionalidad son otras de las directrices. No podía faltar un régimen de incompatibilidades del cargo o la prohibición de cuentas en paraísos fiscales, determinación que viene muy a cuento con todo el revuelo por los papeles de Panamá que han provocado incluso la dimisión de un ministro. Por pedir, las buenas prácticas se extienden hasta la presencia en Internet y redes sociales, aunque no es de extrañar con todos los revuelos que se están generando en el ámbito político en plataformas como Twitter.
Recuerda que los desplazamientos en el coche oficial deben estar vinculados a las responsabilidades de los cargos y en ningún caso al uso privado. De hecho, dentro del municipio donde se encuentra la organización proponen la compatibilidad con el transporte público. Sobre el uso de taxis, deberá informarse sobre el trayecto y el objeto de desplazamiento.
Sobre los viajes fuera de la Comunitat, serán delimitados las actividades institucionales que se realicen por pertenecer a partidos políticos, por razones personales o ajenas a la función del cargo. Aunque no se trata de personal de la Generalitat, el alcalde de Valencia, Joan Ribó, aseguró que dimitiría si se demostraba que un viaje a Galicia pagado por el Ayuntamiento y denunciado por el PP, se trataba de un acto de partido. En el caso de desplazamientos, se optará por tarifas de turista siempre que sea posible.
Sobre obsequios, regalos y favores, el Código de Buen Gobierno insta a no aceptarlos siempre que vayan más allá de los usos habituales, sociales y de cortesía. Actualmente, todos se publican en el portal de transparencia. Siempre que no puedan devolver los regalos que se extralimiten, pasarán a ser parte del patrimonio público. Sobre los regalos de cortesía, se pide que en la medida de lo posible sean productos autóctonos valencianos y de contenido preferentemente cultural.
¿Y cuáles son los datos de los diputados que deben estar expuestos de forma pública? El contacto institucional, el currículum, la agenda institucional y las declaraciones de actividad de bienes y rentas que deberán ser presentadas de forma telemática y con el sistema que se les proporcione, lo que evitará los PDF cumplimentados con boli y facilitará a quien desee acceder a ellos una mejor información.
Con todo esto sobre la mesa, será el Consell de Transparencia quien reciba las quejas sobre posibles incumplimientos de las conductas reguladas en este código mientras que Les Corts se encargarán de adoptar medidas de responsabilidad política por vulneraciones de los distintos artículos que pueden ir desde la llamada de atención, a la publicación en el Diari Oficial de la Comunitat Valenciana o incluso el cese del cargo. Tras la marca de un cargo, toda su información seguirá siendo públicas hasta dos años después de marcharse de la administración.