El responsable de Riesgos de Ebury no duda en que una declaración unilateral de independencia catalana podría provocar un mayor trasvase de dinero del euro hacia la moneda americana
VALÈNCIA. El dólar continuó con su fortaleza la semana pasada frente a cualquier otra divisa importante. La crisis constitucional en España sobre Cataluña provocó algunos flujos refugio hacia el dólar a principios de la semana. Fuertes sorpresas macroeconómicas e indicios de presiones al alza sobre los precios en EEUU hicieron que el dólar terminase la semana en sus niveles más altos desde julio.
La libra fue la gran perdedora de la semana pasada ya que la desunión conservadora y el precario liderazgo de Theresa May plantean nuevas preguntas sobre la capacidad de Reino Unido para negociar un acuerdo en cuanto al Brexit a tiempo para la fecha de marzo de 2019.
Los datos de inflación en EE UU este viernes serán clave para el mercado de divisas esta semana. Cualquier sorpresa al alza en la inflación subyacente probablemente provocará un aumento de interés en la reunión de diciembre de la Reserva Federal. Los mercados también seguirán de cerca las noticias de la crisis española que podría pesar sobre el euro.
A falta de noticias significativas de la economía o del BCE, el euro se negoció sobre todo en reacción a las fuertes noticias economicas conocidas en EE UU y con la vista puesta en el desarrollo de la creciente crisis constitucional en España en relación al estatuto de Cataluña. Hasta ahora, el impacto negativo sobre la moneda común parece ser muy modesto. Sin embargo, una declaración unilateral de independencia esta semana podría agravar el problema y provocar una presión a la baja. Además de los titulares políticos, los mercados se centrarán en el informe de la producción industrial el jueves, así como en cualquier signo de progreso en las conversaciones de coalición alemana.
El malogrado discurso de Theresa May en la Conferencia Tory la semana pasada trajo nuevas dudas sobre la fortaleza de su posición como Primera Ministra, en medio de la persistente conversación sobre su falta de apoyo entre los diputados conservadores. Los mercados reaccionaron despiadadamente, empujando a la libra a la baja y provocando que ésta tuviera el peor comportamiento de la semana entre las divisas principales. Esta semana parece que habrá algo de luz por parte de los datos que se conocerán. Se espera que la libra se mueva en base a las filtraciones y titulares de la quinta ronda de conversaciones en torno al Brexit.
El informe sobre empleo de septiembre se vio afectado por los trastornos provocados por los huracanes en EE UU y, por lo tanto, debe interpretarse cuidadosamente. El número negativo presentado refleja casi ciertamente la incapacidad de muchas empresas en Texas y Florida para operar plenamente. El gran salto en las ganancias salariales fue tal vez un poco más significativo y ayudó al mercado a elevar la probabilidad de subidas en diciembre hasta el 80%. Creemos que este informe debe ser ignorado en gran medida y esperar al siguiente para confirmar que las ganancias de salarios tan deseadas desde hace tiempo finalmente han llegado.
Las cifras de inflación deberían reflejar similarmente algún impacto de los huracanes pero creemos que la inflación subyacente, que excluye los componentes volátiles de alimentos y energía, seguirá siendo significativa.
Enrique Díaz-Álvarez es director de Riesgos de Ebury