La escena postpunk valenciana se reúne en el Incendiari Fest

VALÈNCIA. Ja crema la flama, y lo hace desde una cerilla que compone el logo del Incendiari Fest, un festival de música en el que se busca reivindicar lo que se mueve en València dentro de la línea del postpunk a través de grupos como Amor Bizarro, La Plata, Biznaga y Lisasinson. El objetivo es convertirlos en referentes y trasladarlos a un nuevo escenario, tal y como lo define su directora Àngela Presència, quien asegura que buscan sacarlos del circuito de las salas para poder llevarlos a un nuevo escenario. A través de las referencias surge en parte la idea del festival, inspirados por el grupo Trippin'you que consideran a los valencianos de La Plata como referente: “Estaba clarísimo que tenía que estar La Plata, de ellos nace todo y es la base que sostiene en parte el festival”, a través de ellos surge la idea de aunarlos en un mismo cartel, en un festival que busca no dejar a nadie indiferente gracias a su amplia oferta. 

Lo que en un principio surge de una simple observación busca en realidad algo más complejo, dar vida a la escena musical valenciana que cada vez más se convierte en referente y se escucha por todos los lados. Presència considera que es esta es la forma adecuada de valorar lo que tenemos y de hacer un festival que sea "por y para los valencianos", con ansias de expandir el talento pero jugando en casa. Una forma también de generar un espacio rodeado por la música pero con varios componentes que generan un lugar de encuentro entre los valencianos que se atreven a descentralizarse de la capital y a madrugar un poquito para poder sumergirse en esta experiencia musical que celebra al principio de este verano su primera edición de muchas (esperemos).

El festival se sostiene de sobra con el talento valenciano con una oferta cultural que no solo ofrece música en directo sino también otras actividades en Burjassot, un lugar que se adapta a todas estas posibilidades. Fuera del entorno del Auditori se plantea también un market de artistas locales con fanzines, y más piezas… También habrá un espacio habilitado con pistas de skate para los más atrevidos, generando así no solo un espacio sino un universo compartido por los fans de este tipo de escena. El evento busca a su vez ligarse con la idea del postpunk, sin embargo cuando investigaron sobre ello se encontraron con una escena tirando más bien a “oscura”: “Lo íbamos a llamar algo relacionado con violencia pero no era plan poner eso al lado de la insignia de Burjassot”, aclara Presència, quien al final optó por el concepto de Incendiari para darle “más luz al asunto”.

También se busca una doble acción de descentralización: tanto del ocio en València capital como el de la oferta únicamente nocturna: “Planteamos un concepto en el que puedes salir y ver a tu grupo favorito actuar sin que te den las 5 de la mañana”, todo ello a su vez celebrándolo en una localización muy estudiada, para que todo lo que rodea a la música tenga cabida, y defendiendo que el Incendiari se celebra en Burjassot porque en València “no caben más festivales”; tal y como lo aclara Presència: “València no tiene por que albergar todos los festivales, Queremos que sea un festival por y para la gente de aquí, buscamos valorar lo que tenemos en casa y disfrutarlo”. Todo ello en una oda a la escena puntera valenciana, que sin duda va a explotar y se va a convertir en referencia, a través de la primera edición de este festival y más allá de la terreta sin ningún tipo de duda.