Incarlopsa, proveedor cárnico de Mercadona, crece un 4,7% en pandemia pero reduce beneficio

VALÈNCIA. La empresa Industrias Cárnicas Loriente Piqueras (Incarlopsa), proveedor de embutidos y jamones de Mercadona desde hace más de 20 años, cerró el pasado ejercicio de 2020 con una facturación que superó los 882,6 millones de euros, un 4,7% más que en 2019, según consta en sus cuentas anuales depositadas en el Registro Mercantil. 

No obstante, la firma con sede en Tarancón (Cuenca) redujo un 14,7% su beneficio al pasar de los 42,7 millones logrados en 2019 a los 36 millones que obtuvo en el año de la pandemia. Una circunstancia que, según explican en su memoria de gestión, se debe al "incremento de gastos de explotación y de personal para hacer frente a la pandemia" con el fin de no dejar de operar "en ningún momento". Además, Incarlopsa repartió un dividendo de 11 millones de euros con cargo a la cuenta de resultado del ejercicio 2020. 

El impacto del coronavirus, eso sí, no ha tenido reflejo en su cifra de negocios que ha aumentado. De hecho, la empresa explica su actividad se encontraba entre las que el Gobierno consideró esenciales durante el primer estado de alarma, por lo que el negocio continuó "dentro de una cierta normalidad". "Ninguno de nuestros centros de trabajo tuvo que discontinuar su actividad", señalan. 

Tampoco tuvo que acogerse a medidas de reducción de personal durante este pasado año. Es más, el número medio de empleados se incrementó un 1,5% durante el ejercicio de 2020, debido al incremento en la actividad. De esta forma, cerró 2020 con una plantilla compuesta por 2.440 personas.

De cara al futuro, la compañía subraya que cuenta con una posición "solvente" que le ha permitido "atender a sus obligaciones de pago de forma habitual". Además, destaca que la dirección realiza "una revisión constante de la evolución de la situación con el fin de adelantarse a los posibles impactos tanto financieros como no financieros que pudieran tener lugar", especialmente en estos tiempos de pandemia.