Rafael Blasco, durante una de las sesiones del último juicio del 'caso Cooperación'. Foto: EVA MÁÑEZVALÈNCIA. El exconseller Rafael Blasco ha declarado este viernes para defender su inocencia y negar la participación en los hechos que se le atribuyen en la quinta pieza del caso Cooperación, cuyo juicio finaliza hoy en la Audiencia de Valencia. La investigación se engloba dentro del desvío de fondos de las ayudas al Tercer Mundo y es la relativa a las presuntas irregularidades en contratos informáticos entre 2008 y 2011.
En ella consta que al menos siete contratos por un importe total de más de un millón de euros habrían sido amañados, vulnerando los principios de transparencia y libre concurrencia en la contratación pública. Éstos, de acuerdo con las indagaciones, fueron adjudicados a tres empresas (Fujitsu España Service, Comteldat e Ibermática) que hacían de intermediarias y que luego subcontrataban con las firmas Dinamiz-e y S&C Vision y Análisis, al frente de las cuales estaba el empresario Augusto César Tauroni o alguno de sus considerados testaferros.
Tres de los acusados alcanzaron una conformidad con la Fiscalía por la que admiten su participación en los hechos y aceptan penas de alrededor de un año de prisión. Tauroni –un año y tres meses–, la que fuera secretaria general de la Conselleria de Cooperación Tina Sanjuán y el exjefe de servicio de informática Javier Mucia (un año cada uno). El exconseller, por su parte, rechazó pactar, por lo que el juicio ha seguido adelante.
Durante la última sesión, ha respondido al tribunal, la Fiscalía y las defensas de los acusados. Así, ha asegurado que no propuso ni sugirió nada a nadie en relación con los contratos de informática. "Es falso que yo recomendara que se tuviera un trato favorable sobre un tema de contratación. Nunca hice nada de eso", ha afirmado.
Blasco ha comentado que él "no sabía ni lo que era la contratación centralizada" que se usó para adjudicar los servicios a empresas vinculadas a Tauroni, que no hubo "interés" en adjudicarle a él y que "jamás" ha tenido "una relación de amistad" con el empresario. Además, ha remarcado que Tina Sanjuán "no habría aceptado nada que no fuera legal y correcto" y que mucha de la documentación que figura en esta causa es de los años 2012 y 2013, una etapa en la que él ya no era conseller.
Por su parte, Tauroni ha declarado para reconocer su participación en los hechos: buscaron a las empresas y les favorecieron con los contratos desde la Conselleria de Cooperación. Mientras, Sanjuán ha admitido que Blasco le dio indicaciones para contratar a una de las empresas y que como no reunía los requisitos legales facilitaron otra fórmula para la adjudicación. Murcia se ha remitido a su primera comparecencia ante el juzgado y a la conformidad con la Fiscalía.
