VALÈNCIA. El presidente de Femeval (Federación Empresarial Metalúrgica Valenciana), Vicente Lafuente, señaló este miércoles la preocupación de la Federación respecto a la recuperación del sector automovilístico y de la aeronáutica en el 2021. Una preocupación mayor respecto a la de los otros subsectores y que va "más allá de la incertidumbre de la crisis", debido a la reconversión del modelo de movilidad y energía que presentan ambos.
Así lo expuso Lafuente en la presentación de los XIX Premios FEMEVAL que se celebró de forma virtual como "una edición especial de carácter simbólico". Bajo el lema "Este año todos ganamos" se buscó reconocer y aplaudir la labor de las más de 3.000 empresas de la industria, comercio y servicios del sector del metal que forman parte de la Federación a fin de agradecerles "su empeño por sustentar la economía en las actuales circunstancias".
Circunstancias ante las que el presidente realizó un balance de la situación del sector enfocado en el tercer trimestre del año. De esta forma, señaló una caída de un 18,4% en la facturación, en la que el subsector menos perjudicado ha sido el del comercio del metal con una disminución media de su facturación del 11,5%.
No obstante, el más afectado ha sido el de la industria y venta y reparación de vehículos al descender cerca de un 21%. Un sector que también se ha visto especialmente perjudicado en las exportaciones con un retroceso superior al 25% dentro de la caída genérica de estas en un 20,56% al decrecer todos los destinos. Entre ellos, Lafuente señaló con "especial gravedad" a Reino Unido con una caída del 40%, mientras que indicó como salvación de los datos a Dinamarca por sus subidas del 163%.
Frente a esta situación del sector automovilístico, el presidente remarcó que hay que poner "énfasis" en la importancia de una empresa como es Ford en cualquier dato a nivel autonómico, dada la factoría de Ford Almussafes. En concreto, la planta ha reducido un 33 % el número de unidades producidas respecto al año pasado y, además, se encuentra en su sexto Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE) desde 2019.
En cuanto a los ERTE dentro del sector del metal valenciano, Lafuente indicó que ya están saliendo de este los trabajadores de servicios y comercio del metal, en especial los del pequeño comercio beneficiado por el cambio de hábitos de consumo. Sin embargo, aludió a la dificultad del subsector del automóvil a causa del parón de ventas de los concesionarios.
Por lo que respeta al empleo, el sector cuenta actualmente con un total de 193.049 puestos de trabajo registrados y ha perdido 6.634 desde finales del año pasado, lo que supone una pérdida del empleo del 3,3%. A su vez, el presidente subrayó que no existe "un porcentaje grande de cierre de empresas que pueda preocupar" si se tiene en consideración el número de asociados, de forma que no ha habido una "reducción significativa".
Con todo, Lafuente comentó que las "percepciones" para el año que viene se basan en que los subsectores del sector del metal valenciano comiencen remontar y a recuperarse para mitad del 2021, pese a las incertidumbres ocasionadas por la pandemia.
Una recuperación que preocupa para los sectores del automóvil y fabricación de componentes de la aeronáutica, debido a la reconversión del modelo de movilidad y energía que experimentan a causa de la crisis sanitaria. Ante esta dificultad, desde Femeval se impulsó a estas empresas a intentar reorientarse buscando algún tipo de medida adicional, ya que "no está en sus manos lo que va a pasar".
Para cuando se inicie la recuperación, Lafuente expresó que el sector arrancará con ventaja porque "han sabido demostrar su propósito". Inclusive, las empresas de la Federación han aumentado su valoración de la situación de mejora a un 5,8, tras una valoración que no superaba el aprobado con un 4,1 después de la caída sufrida al inicio de la pandemia. Por contra, las expectativas para finalizar el 2020 se mantienen pesimistas con un valor de 42,7 puntos en un baremo de 0 a 100.
El presidente comentó, además, que Femeval no ha parado de solicitar la responsabilidad para evitar malas prácticas, así como políticas económicas de recuperación a las administraciones para que la industria, servicios y comercio del metal no entrasen en fase de hibernación, puesto que "lo planteado hasta el momento no ha sido suficiente".
De esta manera, el sector metalmecánico propuso en la primera ola siete medidas en un plan de reactivación denominado “Medidas para el día después”. Algunas de ellas son la reorientación al mercado local y la reactivación industrial con estímulos al consumo, la mejora de la competitividad apostando por mercados laborales ágiles, la transformación digital o la apuesta por las energías renovables, el autoconsumo y la movilidad.
En cuanto a Femeval, la Federación ya ha trabajado en su quinto plan estratégico que va de 2021 a 2024. Un "cuaderno de bitácora" que les permite revisar su gestión con una "mirada crítica" para conseguir un modelo de gestión y saber definir acciones. A su vez, tienen ante ellos para el 2021 el cierre de la negociación de los convenios colectivos tanto de Industria, Tecnología y Servicios como de Comercio del Metal.
"Este es nuestro horizonte: mantener la guardia bien alta para ser mejores y continuar actuando de una manera responsable, transparente y sostenible como siempre hemos venido haciendo. Ahora toca seguir poniendo en la balanza disciplina, constancia, rigor, responsabilidad... Ese es nuestro trabajo y nuestra misión", concluyó Lafuente.