Hoy es 5 de octubre
GANDIA. Cinco meses han transcurrido desde que Pascal Renolt fuera expulsado de Ciudadanos "por vulneración del código ético”. Fue en mayo de 2021 y hasta entonces el que fuera cabeza de lista de la formación naranja en Gandia ha seguido contando con los privilegios de formar parte de un grupo municipal (un despacho, asesor y un secretario), así como un sueldo por desempeñar sus funciones. Situación que cambiará en la sesión plenaria de este jueves, cuando pase formalmente al grupo de los no adscritos en el Ayuntamiento.
A partir de que Pascal Renolt tenga esta condición, queda la duda de si supondrá también una pérdida de derechos económicos, que en su caso ascienden a más de 40.000 euros (tiene dedicación exclusiva). Al respecto, el Tribunal Supremo dictó que quienes pasen a la condición de concejal no adscrito por deslealtad a su partido no podrán asumir cargos o retribuciones que impliquen mejoras personales, políticas o económicas.
Sin embargo, como la figura de Renolt es la de fiscalizar al gobierno, todo apunta a que mantendrá su sueldo (44.574 euros brutos al año) y, como máximo, percibirá la misma cuantía que en su etapa como concejal de Ciudadanos. Por ende, no contará con el fijo anual que tiene cada fuerza política (3.500 euros) para gastos de representación institucional. Además, dejará de contar con los privilegios de formar parte de un grupo municipal.
Un supuesto que corroboran desde el Ayuntamiento de Gandia, aunque aseguran que serán los técnicos quienes analizarán la situación. De hecho, es muy probable que su situación no se esclarezca hasta el próximo pleno del Ayuntamiento de Gandia, ya en el mes de noviembre. Además, a partir de la resolución del pleno, Renolt tiene quince días para formular alegaciones.
La desvinculación del empresario y DJ a la formación naranja se remonta a finales de febrero de 2021, cuando la dirección de Ciudadanos le abrió un expediente disciplinario por discrepancias respecto a su labor política. Una decisión propiciada por el hecho de que Renolt pinchó como DJ en algunas fiestas cuando tenía dedicación exclusiva con su partido. Según ha podido saber Valencia Plaza, lo hizo hasta un total de veinte ocasiones y pocas de ellas fueron justificadas. Lo que supone que no se haya podido demostrar que cobrara por este trabajo, pero tampoco que no lo hiciera.
A ello se añade que en una de las causas por la que Ciudadanos le abrió expediente fue por lo que detectaron como irregularidades en el uso del dinero público. En este sentido, Valencia Plaza ha podido saber de la existencia de facturas por contratos cuyos conceptos son de asesoramiento de redes sociales o incluso de asesoramiento contable o en materia turística durante los últimos meses de las limitaciones horarias y de movilidad en la Comunitat Valenciana por el coronavirus. Conceptos que llaman la atención porque Renolt contaba con una asesora (Patricia Grau) que se encargaba de asuntos similares.
El Comité de Garantía de Ciudadanos formalizó la expulsión del concejal el 17 de mayo de 2021. Desde entonces, la formación naranja ha estado esperando a que el gobierno de Gandia formalice su expulsión aprobando por pleno que se una al grupo de los los no escritos. Han pasado cinco meses.
No hay que olvidar que el nombramiento de Pascal Renolt como cabeza de lista en 2019 estuvo envuelto en una cierta polémica por su vinculación al mundo de la noche y porque implicaba quitar del cargo a Ciro Palmer, cuyo papel en las elecciones municipales de 2015 fue crucial. Lo fue al dar su apoyo al Partido Socialista presidido por Diana Morant y no al Partido Popular liderado por Arturo Torró, que había ganado en las urnas pese a no revalidar la mayoría absoluta. Un voto que llevó al Partido Socialista a gobernar en coalición con Compromís Més Gandia.