VALÈNCIA. La Sindicatura de Comptes ha publicado el informe de fiscalización sobre el entorno de control del Ayuntamiento de Paterna (2019-2021), un documento en el que analiza la gestión en en el área administrativa, la económico-financiera, la intervención y los controles básicos de seguridad. En total, se ha alcanzado una puntuación media del 68%, lo que sitúa al Consistorio en un nivel de riesgo medio.
De los cuatro apartados, la ciberseguridad es el que requiere de un cambio con más urgencia, pues tan solo ha llegado al 62,7%, acercándose al nivel de alto riesgo. La Sindicatura ya alertó de esta situación en su anterior resolución de 2019 y, de nuevo, insta a mejorar este aspecto que todavía es insuficiente. Entre las recomendaciones, destacan la restricción de acceso a dispositivos físicos no autorizados a la red, actualizar los sistemas obsoletos y la aplicación de seguridad por defecto en todos los sistemas.
El Ayuntamiento ya ha comenzado a dar los primeros pasos para lograr impulsar esta área, pues el pasado mes de febrero anunció la creación del nuevo Centro de Operaciones de Ciberseguridad para aumentar la protección de la información y las comunicaciones digitales. Asimismo, en noviembre se adhirió a la Red Nacional de Centros de Operaciones de Ciberseguridad para obtener información a tiempo real sobre las posibles amenazas.
Con un 64,1%, la intervención es el segundo aspecto en el que se deben corregir deficiencias. En este sentido, el informe señala que no se realiza control financiero de los ingresos ni se ha llevado a cabo un plan anual de control de financiero que recoja las actuaciones de control permanente y auditoría pública durante los ejercicios de 2019 y de 2020. También subraya que el órgano interventor no ha elaborado un resumen de los resultados del control interno, hecho que ha dificultado el desarrollo de un plan de acción; así como tampoco ha realizado informes sobre el cumplimiento de objetivos de estabilidad presupuestaria y límite de deuda pública.
En tercera posición, la gestión económico-financiera alcanza el 69,1%. La mayor problemática presente en este concepto es la relativa a los gastos de inversión. A la hora de planificar inversiones, no se tiene en cuenta el coste de mantenimiento ni la financiación posterior. Además, no existe un plan de inversiones para un plazo de cuatro años, anexo al presupuesto general.
Por último, la gestión administrativa es la que mejores resultados presenta, con un 76,2%, cerca del bajo riesgo. En este caso, la Sindicatura expone que no se dispone de un organigrama actualizado.
Con todo, ha propuesto una serie de sugerencias con el fin de ganar transparencia y protección, centradas en elaborar un organigrama actualizado que incluya las funciones y responsabilidades del personal, incorporar los gastos de caja fija en el portal de transparencia de la entidad, contar con un registro único con información acerca de las subvenciones concedidas y su situación, adoptar medidas de prevención del fraude o corrupción y elaborar un plan de inversiones realista.