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Los ingresos obtenidos con este impuesto se destinarían a promoción turística
VALENCIA. "No habrá impuesto al turismo en 2016, pero todos los impuestos están sobre la mesa". La secretaria autonómica de Hacienda, Clara Ferrando, explicó durante la presentación del proyecto de Presupuestos para 2016 que el Consell ha iniciado contactos con el sector turístico para trabajar en la posibilidad de implantar un impuesto a las pernoctaciones hoteleras a partir de 2017.
Tras lanzar esta posibilidad en una comparencia parlamentaria la pasada semana, Ferrando se ha reunido en los últimos días con representantes del sector para contener el rechazo surgido ante la opción de que el Consell se planteara una nueva tasa turística.
A raíz de esos contactos, la secretaria autonómica de Hacienda sostuvo este viernes que el turismo es un área estratégica para el nuevo Consell, por lo que no se tomarán medidas que no sean negociadas con el sector. A partir de ahí, insinuó que a medio plazo se podría implantar un gravamen a las pernoctaciones con el objetivo de captar recursos que revertirían en el propio sector. "Necesitamos ingresos para promoción turística", concretó.
En la misma línea, el conseller de Hacienda, Vicent Soler, explicó que la hipótesis con la que se trabaja es la de una tasa específica de retorno para el propio sector, un diseño sobre el que se trabajará el próximo año.
La prometida reforma fiscal del nuevo Consell se ha quedado en algunos retoques concretados en la Ley de Acompañamiento entre los que destaca la subida del impuesto de patrimonio, del que se incrementan los tipos para reforzar la progresividad y se reduce el mínimo exento.
El objetivo manifestado por los responsables de Hacienda es acometer una revisión más ambiciosa del mapa tributario el próximo año. Entre los impuestos sobre los que se tiene más capacidad de actuación están los medioambientales, según recordó Ferrando este viernes.
la Generalitat prevé para 2016 una caída de la recaudación de los impuestos directos del 1,2%, hasta 3.250 millones
En el apartado de ingresos, la Generalitat prevé para 2016 una caída de la recaudación procedente de los impuestos directos del 1,2%, hasta 3.250 millones, mientras que la de los indirectos subirá un 4,5%, hasta 6.075 millones. En el apartado de ingresos tributarios propios se estima una caída del 24,1%, hasta 615 millones. Según Soler, es la consecuencia de un análisis "realista", dado que las previsiones de ejercicios anteriores no se ajustaban a la realidad.
Así, se han revisado a la baja las previsiones de ingresos directos derivados del impuesto sobre el juego, el de transmisiones patrimoniales o matriculaciones, que eran "muy optimistas".
Por otro lado, el anteproyecto de Ley de Presupuestos contempla un total de 383 millones para inversiones reales, lo que supone un aumento del 10,3% respecto al ejercicio anterior.
Según explicó el conseller de Hacienda tras llevar las cuentas a Les Corts, "se ha acabado la época de grandes inversiones", de manera que se estudiarán "muy bien, con un análisis de beneficio y viabilidad, del impacto productivo y social de la inversión", y su priorización será "muy rigurosa".
El director general de Presupuestos, José Moreno, precisó que existen 245,2 millones de inversiones territorializadas, de las que 54,5 millones corresponden a la provincia de Valencia, 45,8 a Alicante y 37,6 a Castellón.