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SALA SGAE
Muy discutible lista de mejores series de la revista Rolling Stone. No solo prefiere las versiones estadounidenses a las británicas cuando se trata de la misma serie, sino que relega obras maestras absolutas, como A dos metros bajo tierra, y premia productos que solo tienen como mérito haber triunfado en los últimos tres años. Lo peor es lo que pone de manifiesto, que la era de las grandes series como Soprano, Mad Men, Wire o A dos metros bajo tierra, se fue para no volver. El mercado ya no admite guiones tan ambiciosos en series con temporadas
Morfydd Clark, la nueva Galadriel: "La diversidad puede enfadar a alguna gente, pero hemos hecho lo correcto"
La serie documental del canal Arte "La respuesta a casi todo" se preguntó hace un par de semanas por la guerra. Es un hecho que la utopía de la paz mundial que se creía posible en los años 90 no ha hecho más que esfumarse. La democracia iba a ser la solución a todos los males, estaba demostrado que las democracias no generan guerras entre sí, dicen los expertos, pero de forma inesperada estas han empezado a menguar y las que quedan, pierden calidad
Un reportaje del New York Times recoge la opinión de residentes y vecinos de Baltimore sobre el impacto que tuvo The Wire. Muchos de ellos se quejan de que ahora la fama de la ficción precede a la ciudad y que sus problemas se han convertido en un divertimento. No faltan visitantes voyeurs de la violencia y degradación de los barrios ni locales blancos de clase media que se enorgullecen de vivir ahí como si eso les hiciera parecer más duros, aunque no pisen las casas bajas
Una serie estudios encontró que a mediados de los 90 empezó a descender la inteligencia media. Estos hallazgos sirvieron para culpar a la inmigración e impulsar sectores como la educación privada, pero estas tesis eran falsas. La inteligencia disminuye también entre los miembros de una familia de diferentes generaciones. Las causas están en la contaminación, que afecta al tiroides y como consecuencia al cerebro; el desarrollo tecnológico que facilita tareas como orientarse con GPS y, sobre todo, el exceso de información que nos impide cribar
Después de mucho resistirme, he dado mi brazo a torcer. Veo series, como casi todo el mundo. Debo decir que tengo buen gusto al elegirlas. Soy fan de ‘Downton Abbey’. La historia de los Crawley me tiene atrapado. ¡Lo que hubiese dado por trabajar para unos condes ingleses!
A cambio de mil dólares semanales, Hugh Hefner obligaba a las mujeres que vivían en su mansión a cortar todo lazo con el exterior. Tenían que operarse y pesar según unos estándares predeterminados y estar siempre disponibles para sus orgías en las que eran drogadas y paseadas atadas con correas de perro para deleite de sus invitados, destacados miembros de la sociedad civil estadounidense. Sin embargo, todo era grabado, lo que luego permitía a Hefner tener el control de los periodistas que habían pasado por sus fiestas para sus intereses o impedir que las chicas hablaran.
Son los guardianes de la democracia, pero en lo que llevamos de siglo hemos visto cómo unas elecciones a la presidencia se resolvían de forma un tanto oscura, llevaron a la guerra al país con obscenas mentiras como pretexto, todas ellas constatadas como tales, su mercado financiero eludió a los reguladores y desencadenó una crisis de hipotecas que arrastró a todo el mundo y, ahora, ha quedado patente que el sector farmacéutico manipuló la agencia del medicamento estatal con puertas giratorias para enganchar a opiáceos a millones de personas
Jesse Armstrong, creador de Succession, fue story consultant en 2017 de la serie Back, una sitcom de humor ácido y corrosivo sobre una familia que regenta un bar de mala muerte en la Inglaterra rural. Es un humor que es un chorro de aire fresco, porque sitúa al espectador del lado de los que no triunfan en la vida y no tiene ninguna lección que darle, tan solo una dosis de risas
El último capítulo de la tercera temporada de Succession logra un 9,9 en IMDb, una calificación que no consiguieron ni los mejores episodios de Los Soprano o The Wire. El desenlace fue magistral. Llevó la disputa por la herencia entre unos hijos inútiles y su padre, tiburón de las finanzas creador de un imperio, a unos límites de crueldad y vergüenza ajena inenarrables. Por supuesto, detrás está Jesse Armstrong, británico y guionista en series con tan mala baba como Peep Show o The Thick of it
Criticada por sus realistas escenas sexuales, con penetraciones anales en mitad del campo, o por sus personajes femeninos que no se depilan las axilas, 'Please like me' ha sido una de las mejores series de los años 10, una comedia ácida y corrosiva que con el paso de las temporadas acabó siendo un drama extraordinario. Su secreto estaba en mostrar problemas como la soledad, el paro y las enfermedades mentales como lo que son y no adornándolos de drama innecesario o fetiches varios para el espectador medio
En American Crime Story: Impeachment, Ryan Murphy reexamina la narrativa oficial alrededor del escándalo de Bill Clinton y Monica Lewinsky con una mirada acorde al movimiento #MeToo. Un enfoque que hace justicia a la imagen de la becaria de la Casa Blanca, por entonces cruelmente machacada por los medios, pese a que en su conjunto la serie sucumbe al melodrama, la parodia no intencionada y el maniqueísmo
El cineasta y humorista catalán estrena la primera serie producida por Filmin, Doctor Portuondo
Steve Martin, Martin Short y Selena Gómez son tres solitarios vecinos en un lujoso edificio neoyorkino, el Arcadia. La aparición de un cadáver despierta su obsesión por convertirse en aprendices de investigadores y productores de un podcast sobre un asesinato real
Con 20 nominaciones a los premios Emmy, solo los seriéfilos más activos se sumergen en esta encantadora comedia distribuida por una plataforma, Apple TV+, con apenas penetración en España
'Mobking. The War of the Godfather's' y 'Smoking Gun A Murder Mystery' recrearán un casino de Miami y las oficinas del FBI