VALÈNCIA (EP/EFE). La tecnológica valenciana Codigames iniciará un expediente de regulación de empleo al 20% de su plantilla, unos 20 trabajadores, como consecuencia de la caída de su negocio, según informan fuentes sindicales y de la propia compañía.
A finales de enero Codigames, con sede en València, comunicó a la plantilla -unos 88 empleados- la intención de llevar a cabo un ERE alegando que su situación económica había menguado y era necesario recortar costes, según ha indicado en un comunicado la Coordinadora Sindical del Videojuego, que forma parte de CGT.
Liderada por Francisco José Martínez y Zacarías Gómez, la compañía está especializada en juegos Idle, que consiste en realizar acciones simples de hacer clicks con el dedo y que el juego se desarrolle mediante la espera; con el género tycoon, centrado en la gestión y estrategia económica. Codigames cuenta con dos fuentes de ingresos en estos videojuegos que se descargan de forma gratuita: a través los micropagos que el usuario hace a medida que juega para obtener ventajas y nuevas funcionalidades; y también a través de los anuncios publicitarios que muestran en la app, que el jugador ve de forma voluntaria a cambio de recompensas.
Sin embargo, desde la compañía señalan que este modelo no funciona desde hace más de un año, al no ser capaces de llegar al usuario de forma económica y, pese a que han intentado adaptarse, "el mercado no absorbe los proyectos que han desarrollado en los últimos ejercicios". "Llevamos tiempo retrasando una decisión como ésta, más de un año, y ya era inevitable", aseguran.
La compañía, que fue impulsada en sus inicios por Angels, vehículo de inversión del empresario valenciano Juan Roig, señala el incremento en los costes de marketing y la decisión de centrar esfuerzos en mejorar sus primeros desarrollos: Idle Supermarket Tycoon, sobre cadenas de supermercados; Idle Theme Park Tycoon, sobre parques temáticos; Idle Fitness Gym Tycoon, sobre gimnasios; y Hotel Empire Tycoon, sobre hoteles.
Mientras, la dirección ha decidido dejar de realizar nuevos lanzamientos, y las pérdidas de los últimos meses les ha llevado a tomar la decisión. "No teníamos capacidad de dar sentido a la estructura que teníamos", aseguran. Entre los perfiles afectados por el ERE hay desde programación de videojuegos a artistas.
La compañía cerró 2023 con una facturación de 18 millones, frente a los 32,8 millones de euros de 2022. Mientras, el beneficio fue de 2 millones respecto a los 9 del año anterior, con pérdidas en el último trimestre. Mientras, la compañía repartió 30 millones de dividendos entre 2020 y 2022, que en 2023 no se dieron. Desde Codigames insisten en que no pueden llegar a la peor situación posible para tomar medidas acerca del modelo.
Sobre la acusación de reparto de dividendos, la firma asegura que la mayor parte de los beneficios se ha reinvertido en la compañía y señala que, si esta va mal, los primeros perjudicados en su patrimonio son los propietarios. También aluden a la recompra de acciones.
En 2019, los fundadores recompraron la mayoría de la empresa a sus socios inversores, Caixa Capital Risc, Faraday Venture Partners y Angels en una operación singular, ya que los emprendedores adquirieron su participación mediante los beneficios obtenidos por la compañía. Tras la operación, Angels quedó como único socio inversor.
