El PET-TC PSMA combina la tomografía por emisión de positrones (PET), la tomografía computarizada (TC) y un radiofármaco que marca el antígeno prostático específico de membrana (PSMA)
VALÈNCIA (VP). Según la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), el cáncer de próstata es el más frecuente entre los hombres. En los hombres con diagnóstico de cáncer de próstata con riesgo metastásico, se usa una técnica de imagen que combina la tomografía por emisión de positrones (PET) con la tomografía computarizada (TC) y un radiofármaco que marca el antígeno prostático específico de membrana (PSMA). Esta técnica, llamada PET-TC PSMA o PET-PSMA, tiene una probabilidad mucho más alta de detectar enfermedad.
Para el doctor José Rubio, urólogo del Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre, “el PET-PSMA es una técnica que permite en algunos hombres detectar con mayor eficacia que los métodos habituales (TC, RM, gammagrafía ósea o PET-Colina) y de forma más precoz (incluso con niveles de PSA por debajo de 1 ng/ml) si el cáncer de próstata se diseminó a otras partes del cuerpo. Así pues, uno de cada tres casos de cáncer de próstata tratado con prostatectomía radical -cirugía- reaparece tras un periodo más o menos largo de ausencia de enfermedad; reaparición que se denomina recidiva”.
Esta técnica fue implementada de forma pionera en el Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre por el responsable de medicina nuclear, el doctor Pablo Sopena quien comenta que “nuestro servicio cuenta con más de 20 años de experiencia PET-TC en oncológica, de hecho, fuimos seleccionados en calidad de experto en el primer simposio que realizó sobre la PET-PSMA la Sociedad Española de Medicina Nuclear”. “Lo relevante es que con esta técnica se ha logrado la detección precoz de recidivas de cáncer de próstata con cifras muy bajas de PSA, de hecho, son bajas que pasan desapercibidas con las pruebas diagnósticas de imagen habituales”, subraya el doctor Sopena.
Por su parte, para el doctor Rubio, "el PET/TC PSMA ha tenido una trascendencia crucial, sobre todo en situaciones en las que se ha dudado sobre la efectividad de algunos tratamientos ya que ha permitido dirigir tanto la cirugía como la radioterapia en este tipo de enfermedades, así como el desarrollo de nuevos fármacos que permiten, al utilizar estas pruebas de imagen, implementar y saber dónde está la enfermedad, ya que toda nuestra actividad quirúrgica o radioterápica se basa en un marcador como el PSA y en unas pruebas de imagen”.
Para el profesional, “la aparición de estas nuevas técnicas hace que, hoy por hoy, se establezcan situaciones de diagnóstico que hace unos años no se daban, e influyen en todos los aspectos y estadios de la enfermedad. Sin duda, se abren claramente oportunidades de tratamientos más precoces y precisos, de tal forma que puede, en determinados casos, dilatar en el tiempo la necesidad de un tratamiento sistémico que nunca llega a ser curativo, sino paliativo". Además, el especialista añade que "esto es muy importante por los efectos secundarios que ese tratamiento tiene en calidad del paciente que, en este caso, es la hormonoterapia".
En cuanto a las ventajas entre la PET-PSMA y las técnicas convencionales de imagen, el doctor Sopena destaca “la capacidad de detección la enfermedad en fases muy tempranas, con cifras de PSA muy bajas, seleccionar antes y el tratamiento óptimo y monitorizar su resultado”.
“Además, recientemente disponemos de tratamiento oncológico isotópicos dirigidos (177-Lutecio) a esas pequeñas células tumorales, que nos permitirán ampliar el arsenal terapéutico”, concluye el doctor Sopena.
Aunque es una intervención poco invasiva, requiere la experiencia de un médico especializado para evitar complicaciones