Centro Comercial Arena, en el que participa NAUVALÈNCIA. La venta del 48,62% de la inmobiliaria valenciana Nuevas Actividades Urbanas (NAU) por parte de Bankia Hábitat se cerró por un valor inferior a los 6 millones de euros. Así se desprende de las últimas cuentas depositadas por Bankia Hábitat -correspondientes a 2016- en las que la compañía indica que ha vendido un conjunto de participaciones cuyo valor neto contable era de 6,973 millones de euros.
En este paquete se encontraban, además de NAU, el 46% que Bankia tenía en la sociedad Costa Bellver SA, que fue adquirida por la familia Calabuig por un millón de euros, así como otras participaciones en las firmas Espai Comercial Vila-real SL y Viladecavalls Park Centro Industrial Logístico y Comercial SA. En consecuencia, el precio por el que vendió Bankia debió de situarse por debajo de los 6 millones de euros.
Se trata, además, de un valor inferior al que tenía asignado la compañía justo un año atrás. Según reflejan también las cuentas de Bankia Hábitat, en 2015 la compañía realizó una dotación por deterioro por valor de 11,7 millones de euros.
Preguntadas al respecto, fuentes de Bankia explican a Valencia Plaza que "la participación de NAU se ajustó en 2015 al valor estimado de mercado de dicha participación para dejarla lista desde el punto de vista contable para su posible venta". "No hay más misterio", subrayan.
En cuanto al precio exacto de venta de NAU, Bankia explica que no está autorizada a divulgar la cifra "por motivos de confidencialidad acordados entre las partes cuando se firmó la transacción".
Atitlan y Gesfesa controlan NAU desde marzo de 2017, cuando adquirieron el 79,66% de la sociedad a través de la mercantil Demeter Aurea SL. El resto de las participaciones las aglutinan Sabadell Real Estate Developement SL (15,22%) y Multiactividades Reunidas SL (5,12%).
La empresa, nacida en 2009 con un capital de 503 millones de euros, participa en importantes inmuebles entre los que se encuentran los centros comerciales Aqua y Arena Multiespacio, pero arrastraba una importante deuda: de 200 millones de euros, según sus nuevos propietarios.
Al cierre de 2017, tras operaciones de desinversión como la venta de tras parcelas de la filial MAI por 33 millones de euros o la de su participación en el casino Cirsa Valencia, el montante se había reducido a alrededor de 95 millones, de los cuales 35 correspondían al afianzamiento de filiales.
