VALÈNCIA (EFE). El Consejo General de Economistas ha revisado a la baja por el conflicto en Ucrania sus últimas previsiones sobre el crecimiento de la economía española en 2022 -difundidas hace apenas veinte días- y proyecta ahora una subida del PIB de entre el 5,2 y el 5,4 %, cuatro décimas menos.
El Observatorio Financiero de la entidad ha publicado un análisis este lunes sobre el impacto del ataque ruso en el que advierte de que los precios de la energía seguirán con su escalada y no se moderarán como se esperaba, igual que ocurrirá con metales preciosos, materias primas y bienes industriales, lo que se traducirá en el mantenimiento de altas tasas de inflación.
De hecho, en su informe se hacen eco del dato adelantado del IPC conocido hoy, que avanza que en febrero la subida de los precios fue del 7,4 %, un nuevo máximo desde 1989. "Es posible que esta cifra, al ser adelantada, no tenga en cuenta la subida de los precios de los últimos días" del mes, han señalado.
También alertan de que las tensiones en Rusia y Ucrania amenazan con revertir la mejora que se observaba recientemente en los problemas de las cadenas de suministro en materia de abastecimiento y transporte, que se habían atenuado.
El conflicto y los elevados niveles de incertidumbre explican la revisión a la baja de unas proyecciones de crecimiento que del lado positivo incluyen la relajación de las restricciones asociadas a la covid-19 y la aplicación de un mayor volumen de fondos europeos en España.
Los responsables del Observatorio han apuntado que esta "desaceleración" podría incluso "acarrear un incremento del número de parados", en contraste con la notable mejora del empleo del 2021.
En su opinión, otra de las posibles consecuencias de la escalada militar en Ucrania es que los bancos centrales se planteen posponer las subidas de tipos de interés previstas para este año y suavizar las retiradas de sus medidas de estímulo.