VALÈNCIA. La Comunitat Valenciana atraviesa una semana de campaña con una fuerte presencia de los primeros espadas estatales. La mayoría de ellos han pisado estas tierras en los últimos dos meses pero todos quieren dejar su sello en una autonomía que reparte un total de 32 diputados en el Congreso.
Ahora bien, no todos están siguiendo la misma receta a la hora de llegar a los electores. Desde hace unos años, sobre todo con la irrupción de las fuerzas emergentes y la consiguiente fragmentación del voto, los partidos políticos vienen descartando atreverse con grandes recintos.
La Plaza de Toros de València recibía, en casi todas las grandes citas electorales, a PP y a PSOE, si bien los socialistas optaban en ocasiones por un escenario algo más modesto -aunque importante- como es la Fuente de San Luis. Ahora, sin embargo, estas fuerzas políticas rara vez se la juegan con localizaciones que excedan las tres mil personas de aforo de un pabellón de buen tamaño.
En esta ocasión, teniendo en cuenta que son las segundas elecciones generales en apenas seis meses, se está acentuando esta línea de actuación en campaña. Aunque hay diferentes estilos.
Por ejemplo, este miércoles Ciudadanos realizó una apuesta clara por el minimalismo en el acto encabezado por Albert Rivera en el Marina Beach de València. De hecho, el propio evento del candidato de la formación naranja se definía como 'Encuentro Ciudadano' y dio el protagonismo a las familias. Un acto más bien íntimo con un formato más cercano al diálogo y a la proximidad con la presencia algo más de 200 personas.
Una línea que venía siguiendo el PP en esta campaña. De hecho, inicialmente el candidato popular, Pablo Casado, visitará este jueves la provincia de Valencia y hasta la noche de este martes, estaba prevista una mera visita a una emblemática empresa agrícola en Algemesí con la consiguiente atención a medios de comunicación. Sin embargo, fuentes del partido aseguraron a este diario que se había decidido a última hora optar por un mitin de tipo intermedio en la capital en algún escenario como La Pechina.
Una elección que, pese a subir la apuesta,contrasta con uno de sus principales competidores en el bloque de derechas, Vox, que es el partido que se va a atrever con un auténtico mitin 'old school' en Feria Valencia. Una decisión que sigue la estela de la adoptada en la anterior campaña, cuando acometieron un potente acto en la Ciudad de las Artes y las Ciencias con unos 4.000 asistentes. En este caso, el aforo podría ser incluso superior dado que en la formación de Santiago Abascal hay quien asegura que el objetivo es doblarlo.
Dos extremos en la organización de actos que encuentran diversas variantes en el medio. El PSOE se decantó el pasado sábado por un mitin de empaque sin llegar a las cifras estratosféricas del pasado: unas 2.500 personas se congregaron en el pabellón de Mislata para escuchar las palabras del candidato y presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez. El líder socialista también estará este jueves en la Comunitat aunque en este caso visitará Castellón.
Més Compromís recibió también el sábado a su socio Íñigo Errejón en el Teatro Olympia de València, con un aforo de un millar de personas que se quedó corto. Una apuesta similar a la que pondrá sobre la mesa este miércoles Pablo Iglesias, que repetirá en Feria Valencia -ya lo hizo para el 28A- en un recinto que entonces acogió a algo menos de 2.000 personas.