VALÈNCIA. Final abrupto para el pulso orgánico acontecido en el PSPV-PSOE entre el líder provincial de Valencia, Carlos Fernández Bielsa, y el entorno de la secretaria general, Diana Morant. La Comisión de Ética y Garantías de la formación socialista ha señalado que el comité provincial extraordinario convocado para el próximo 26 de junio en la pasada ejecutiva del partido el martes no se ajusta a la legalidad estatutaria en el punto referido a los cambios en la dirección provincial que propone el secretario general, por lo que ha procedido a la suspensión cautelar de ese apartado.
Así lo desvela la resolución del comité, ante la que cabe recurso, que se ha pronunciado tras recibir una consulta sobre esta cuestión, donde se expresaban dudas sobre un posible desajuste que se había producido en la convocatoria. El acuerdo emitido no obliga a la celebración de un comité ordinario -tal y como también se solicitaba- ni suspende el comité extraordinario convocado, pero sí lo vacía de contenido.
Cabe recordar que el objetivo del citado comité extraordinario era proceder a diversos relevos en la ejecutiva provincial, debido a que siete de ellos habían sido también incluidos en la dirección autonómica del partido tras el congreso celebrado en marzo y los estatutos del PSOE impiden esa duplicidad, salvo que se autorice una excepción que nunca deberá superar el 10% de los cargos en esa situación.
Una situación mediante la que el secretario provincial, Carlos Fernández Bielsa, pretendía situar en el área de Organización a un dirigente de su confianza en lugar de Vicent Mascarell, mano derecha de la nueva líder del partido, Diana Morant.
El problema es que, tal y como se constató en la reunión de la ejecutiva, todavía no se había concretado quiénes serían los relevados ni tampoco los sustitutos. Esta situación provocó ya en la propia cita varias protestas, dado que para la convocatoria de un comité provincial -máximo órgano entre congresos- extraordinario, se deben conocer con exactitud y antelación todas las cuestiones que se abordarán en la cita del órgano, algo que en este caso no ocurría. Una circunstancia sobre la que pone el acento la resolución de la Comisión de Ética.
Así, según la citada resolución indica que el punto del orden del día relativo a los cambios en la ejecutiva debe ser retirado, por lo que deja en entredicho la convocatoria del comité extraordinario, que podrá ser o no anulado según considere la dirección provincial. Un tropezón para Bielsa, que deberá reiniciar el proceso -con las entradas y salidas concretadas- o reenfocarlo, lo que le devuelve a la casilla de salida en su intento de remodelar la ejecutiva, pero con el lastre de haber causado malestar a la secretaria general, Diana Morant, y a su entorno.
De hecho, tal y como había informado este diario, desde la órbita de la líder la directriz era frenar este proceso de cambios iniciado por Bielsa y también se había puesto sobre la mesa consultar a Ferraz para aclarar quién tendría la última palabra sobre las incompatibilidades.
Por su parte, desde el entorno de Bielsa aseguran a este diario que se van a presentar en breve alegaciones sobre esta resolución y puntualizan que ya se pronunció alguna dirigente en la reunión de la Ejecutiva, como Eva Sanz, la alcaldesa de Benetússer, que incurre en la duplicidad, que se mostró dispuesta a dejar el cargo. En este sentido, las citadas fuentes subrayan que la intención de la dirección provincial es demostrar que sí hay vacantes en la ejecutiva que se deben cubrir, por lo que su objetivo es subsanar las observaciones realizadas por la Comisión de Ética y seguir adelante con el proceso.