La gerencia del IVAM queda desierta y mantiene al museo sin uno de los pilares de su gestión

VALÈNCIA. “La Comisión de Valoración propone declarar desierta la convocatoria efectuada, por no adecuarse el perfil de las candidaturas con las necesidades del puesto”. Fin de trayecto. El Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) ha publicado este jueves la resolución que desde el Institut Valencià d’Art Modern (IVAM) llevan temiendo desde hace meses. El proceso de selección de gerente, que se inició el pasado mes de junio tras descartar la prórroga del contrato de Sergi Pérez, quien hasta ese momento ocupaba la plaza, acaba sin haber encontrado repuesto. A pesar de que, a priori, no parecía tratarse de un proceso complejo, la plaza continuaba vacante meses después de que finalizara el contrato de Pérez, siendo que ahora el proceso finaliza dejando desierta la convocatoria, lo que deja a la dirección del museo sin uno de los dos pilares en los que se sustenta su gestión.

Si bien la Ley del IVAM marca que la gestión del organismo cultural queda dividida en dos ‘líderes’, por un lado la gerencia, enfocada a cuestiones administrativas, y por otro la dirección artística, que recae en Nuria Enguita, es esta última quien se ha visto obligada a asumir las tareas del gerente por suplencia en los últimos meses, una situación que no cambiará a corto plazo. Precisamente en el Consejo Rector que tuvo lugar la pasada semana, en el que, entre otras cuestiones, se dio luz verde a la programación de 2024, Enguita asumía este rol, una suma de responsabilidades que se mantendrá cinco meses después del inicio del proceso de selección de gerente, que ahora tendrá que reiniciarse. 

Fue el pasado mes de julio cuando finalizó el contrato de Pérez, que según ha podido saber este diario no ha concurrido al nuevo proceso de selección. La finalización llegaba en un punto clave para la administración, pues ya habían pasado las elecciones autonómicas que dejaron fuera del gobierno a PSPV y Compromís pero todavía no se había constituido el nuevo equipo de gobierno, formado ahora por PP y Vox. Con el gobierno en funciones en junio se aprobaron las bases de un proceso de selección que ha sufrido varios retrasos con respecto al primer calendario previsto. Fue, sin embargo, en septiembre, cuando la entonces recién llegada secretaria autonómica de Cultura y Deporte, Paula Añó, firmaba la resolución por la que se seleccionaba a las cinco personas que pasan a la siguiente fase del proceso. La cosa parecía reactivarse tras el parón provocado por el verano y el cambio de carteras. Sin embargo, el desenlace no ha sido el esperado.

Contra esta resolución, que pone fin a la vía administrativa, las personas interesadas podrán interponer recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), así como, con carácter potestativo, recurso de reposición. Con todo, el proceso vuelve a la casilla de salida en un momento en el que museo no tiene pocas cuestiones pendientes de resolver sobre la mesa, cómo el impulso de su subsede en el Parc Central -cuya nave ya ha cedido el Ayuntamiento a la Generalitat, aunque no se ha impulsado el proyecto- o la posible donación de la colección de Bombas Gens, asunto que, tal y como confirmó el conseller Vicente Barrera, estaba ahora en stand by. Otra cuestión no poco importante es que la ausencia de gerencia también coincide con una veintena de procesos selectivos en marcha. 

Cabe destacar que la Ley del IVAM contempla que la selección de gerente se llevará a cabo mediante procedimientos que "garanticen la publicidad y concurrencia, teniendo en cuenta el Código de buen gobierno". Por el momento, desde Cultura no han aclarado cuáles serán los plazos para reiniciar el proceso. 

A la espera de gerente en el IVAM… y en el Consorci

El vacío en la gerencia del IVAM no es el único que tiene por resolver la vicepresidencia primera y Conselleria de Cultura, que a pocos metros del museo dirigido por Enguita tiene otro de los grandes melones en cuanto a dirección cultural se refiere. Tras el cese de José Luis Pérez Pont al frente del Consorci de Museus (CMCV) por “irregularidades y mala praxis”, el organismo ha quedado bajo la gestión provisional de los historiadores del arte y trabajadores del organismo Vicente Samper y Lucía González, quienes han asumido las tareas necesarias para evitar el bloqueo de la institución, a la espera de la renovación final de la ‘capitanía’ del Consorci y de su sede, el Centre del Carme (CCCC).

Precisamente el modelo del IVAM, regido por su propia ley, ha servido de inspiración en los despachos de Cultura para cambiar la arquitectura interna del CMCV, pues a partir de ahora la dirección se dividirá también en gerencia y dirección artística, siendo que hasta ahora ambas competencias recaían en una misma persona, algo que ha provocado, de acuerdo con la Generalitat, el “caos” en la institución. “Se han mezclado las funciones de gerencia y de director artístico y esto ha dado lugar a que haya este caos, una situación que seguimos investigando y analizando", expresaba Añó esta misma semana durante la inauguración de la exposición de Felipe Pantone en el CCCC, en la que señalaba que Pérez Pont "estaba actuando como director artístico sin un justo título".

El propio Vicente Barrera, durante una entrevista con Culturplaza, apuntaba que esta “unión de facultades” en una misma persona no era “sano”. “Va hacer una diferenciación en esas dos figuras para que precisamente haya un control. Ese contrapoder no existía en el CCCC, en el Consorcio. Queremos cambiar el modelo porque creemos que el modelo que se ha seguido no es sano”. Si bien en el caso del IVAM la gerencia parece que, de acuerdo a las declaraciones de la propia Añó, se resolverá en un corto periodo de tiempo, la dirección artística llegará tras un concurso abierto, para el que ya se están redactando las bases y que contará con una dotación económica "suficiente y adecuada para atraer talento".