VALÈNCIA (VP). La Fundación Proyecto Vivir ha acogido a más de un centenar de personas en su primer Desfile Solidario. Una jornada donde se ha expuesto la ropa de segunda mano que venden en su Tienda Solidaria para ayudar y proporcionar medicamentos, bonos, becas y alimentos a familias en riesgo de exclusión social, casi cien familias en lo que va de año.
“Esta es ropa que sana, que cura, que alimenta, que transporta… Es ropa que da vida y este desfile es un ejemplo de que se puede ser solidario y sostenible”, ha explicado Cristina Cervera, directora gerente de la fundación.
El evento ha tenido lugar en la Sala Reflectori del Centre del Carme de Cultura Contemporània, donde las candidatas de Miss Grand Valencia se han unido al voluntariado y adolescentes de Proyecto Vivir para mostrar la gran variedad de prendas de segunda mano que ofrece la tienda.
Esta iniciativa ha surgido como motor para fomentar la solidaridad y la economía circular entre los más jóvenes, así como escaparate para terminar con los estigmas que rodean la ropa de segunda mano. Pues, durante 2021 el 50% de los españoles visitó tiendas de segunda mano.
“La fundación ha querido abarcar la diversidad y la inclusión social en un mismo evento, plasmando así nuestra esencia y valores a través de los jóvenes”, ha destacado Lourdes Capote, fundadora de Proyecto Vivir.
Toda la velada ha sido amenizada con la actuación de Proyecto Canta’m que ha elegido para la ocasión un coro femenino a capella.
Ropa que rompe estigmas
Como organización sin ánimo de lucro, Proyecto Vivir lucha por romper estigmas sociales y promover la inclusión social. La tienda es una herramienta más para cumplir este objetivo, en concreto, vende una media de cien prendas diarias y los conjuntos han demostrado la infinidad de opciones que ofrece la moda de segunda mano. Una alternativa que, gracias a los jóvenes, ha ganado muchos seguidores más allá de la edad y del poder económico, ayudando a conectar a la sociedad con la solidaridad y concienciación medioambiental.
Actualmente, la fundación, gracias a los ingresos obtenidos en la tienda, ha podido donar 490 carritos de alimentos, 769 meriendas y 208 ayudas económicas a las familias. Así como ha derivado otras cien familias a otras entidades solidarias que podían prestarles las atenciones necesarias que no podía cubrir Proyecto Vivir.