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VALÈNCIA. El IVASS (Instituto Valenciano de atención Social-Sanitaria), que depende de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, tiene nuevo director general desde hace poco más de tres meses. La llegada de Ramón Orozco (València, 1967) al frente del organismo se produjo tras la dimisión de la anterior jefa, Noelia Martí, que tuvo lugar después de la renuncia al cargo de la subdirectora general. En este impasse, organizaciones sindicales como la Confederación Nacional de Trabajo (CGT) manifestaron su malestar por la ausencia de un responsable al mando.
Orozco, con su versátil experiencia como político, psicólogo y actor, aceptó la propuesta para ocupar el puesto como "un reto" y confía en mantenerlo hasta su jubilación. Es concejal del Ayuntamiento de San Antonio de Benagéber por Compromís y anteriormente ejerció como funcionario en el Instituto Nacional de la Seguridad Social.
La nueva cara visible del IVASS, que cuenta con más de 4.000 personas tuteladas en la Comunitat Valenciana, recibe a Valencia Plaza para hablar sobre la evolución del modelo público de atención a personas mayores y con discapacidad intelectual, así como también para abordar los posibles márgenes de mejora de la entidad en cuestión de reducción de temporalidad del personal, de ampliación de recursos y contrataciones. Asimismo, Orozco aporta detalles sobre el nuevo decreto de tipologías que prevé regular el número de plazas y las ratios en residencias y desvela planes de futuro.
A finales de abril se aprobó su nombramiento en el Pleno del Consell como director del IVASS. ¿Cómo han sido estos primeros meses en el cargo?
Trepidantes, ilusionantes. Se me propuso este puesto y lo concebí como un reto. Confío en quedarme aquí hasta mi jubilación, quiero intentar hacerlo muy bien, este es un equipo increíble. Tengo que hablar sí o sí de Mónica Oltra, porque es la que impulsa las políticas que van a las personas, la pata social, que es la Conselleria que ella llevaba. Tuvo un aumento espectacular de recursos y hubo un cambio de modelo y de visión. Antes, nuestras personas usuarias estaban cubiertas hasta cierto punto, con carácter asistencial y mediante una sutura de centros de carácter privado.
Pero el modelo por el que se apuesta es de gestión pública. Se ha intentado pasar este modelo de psiquiátrico que teníamos como apagado en la trastienda social, al escaparate. Se ha hecho un gran esfuerzo presupuestario, siempre nos faltará la financiación adecuada, pero IVASS ha multiplicado su presupuesto casi por tres en los últimos siete años. Vengo a intentar que cuando me vaya estemos un poco mejor que cuando entré.
¿Qué retos tiene sobre la mesa el IVASS en estos momentos?
Sobre todo las tutelas y la apertura de centros. Tenemos 4.000 personas tuteladas. Esto antes no correspondía al IVASS. Le decía a mi hija que ya no es hija única porque ahora tengo 4.000 hijos más y todos mayores de edad. Otro de los retos es la apertura de nuevos centros e infraestructuras. Se ha abierto una residencia en Alcoy, vamos a abrir otra en Paterna…tenemos 14 centros en cantera de los que se han iniciado los trámites de apertura.
Al margen de esto, también están los procesos de reversión de asociaciones que no pueden cumplir la norma de ratios y tienen dificultad para sostenimiento económico. Se pretende que IVASS sea el brazo instrumental de la Conselleria en cuanto a la gestión de centros. Tenemos 36 recursos entre residencias, viviendas, centros de día, centros ocupacionales y un centro especial de empleo. También conseguir un proceso de estabilización, una estructura pública en este sector social.
¿Está prevista la ampliación de la contratación de personal del IVASS?
Para crear más asalariados nos tienen que autorizar desde Hacienda. Tenemos unos 1.100 o 1.200 fijos, pero tenemos una media de 1.400 al mes. Esto ocurre porque cuando llegan las vacaciones hace falta gente, hay muchas bajas por covid, por jubilación o por gente mayor a la que le dan la baja. Entonces tenemos una contratación personal eventual continua en nuestro departamento. Tenemos más de 1.300 usuarios, entonces casi estamos en una ratio de más de un trabajador por cada persona usuaria.
Una de las asignaturas pendientes en el organismo es reducir la temporalidad del personal
Para eso está la ley 2020/2021 de medidas para reducir la temporalidad que se aprobó el año pasado, estamos en un proceso de estabilización. IVASS, además, es un organismo hiper feminizado, lo digo en positivo, en todas las categorías profesionales hay un mayor número de mujeres. Se trata de lograr la estabilización como pide la ley y como la propia Mónica Oltra determinó. Se ha puesto en marcha con la colaboración de los sindicatos y estamos en un proceso que culminará con la publicación de las bases en los próximos meses, estabilizaremos un porcentaje muy importante del personal y seguiremos en esta línea.
"estamos en un proceso que culminará con la publicación de las bases en los próximos meses, Estabilizaremos un porcentaje muy importante del personal"
¿Cómo ha influido la pandemia en el modelo sociosanitario?
Si en situación normal supuso un impacto brutal, en residencias la gente que salía regularmente a hacer excursiones, de pronto ya no podían y no entendían por qué, las estancias vacacionales desaparecieron. Hemos vuelto a retomarlas hace poco y ha sido fantástico. Luego, los contagios que hubo tanto entre las personas usuarias como entre los trabajadores debido al trato tan cercano. Ahora estamos volviendo a la nuevo normalidad y aun así tenemos resquicios de la covid, pero esperemos que no llegue otra situación similar porque fue demoledor.
Trabajadores y trabajadoras de residencias de mayores y de diversidad funcional, solicitan "una mayor velocidad en la gestión a nivel administrativo de las personas que tutelan para que reciban la atención necesaria y en el momento adecuado".
Estoy totalmente de acuerdo. Hay incorporaciones continuadas de usuarios, algunas son altamente comprensibles, otras tengo mis dudas de por qué no los tutelan familiares más cercanos. Es tremenda la maquinaria que necesita el tutelaje. A mí me llaman cada día cuatro o cinco veces de las entidades bancarias de que una persona con nombre y apellidos quiere sacar el dinero y yo soy su tutor. Es a nivel de comprar ropa, sacar dinero, si tienen propiedades y forman parte de una herencia hay que ir a firmar por ellos, si quieren venderla hay que hacerlo por ellos, el consentimiento médico lo tiene que hacer el tutor…
Para toda esta documentación tenemos un equipo técnico en la Comunitat más de 90 personas y aún nos faltan brazos. ¿Puede mejorar el funcionamiento? Claro que sí, pero os aseguro que funciona muy bien, con gente muy capacitada y muy implicada. Muchas veces tardamos en resolver cosas, siempre se puede mejorar, necesitamos más ayudas, más medios.
"tenemos un equipo técnico en la Comunitat de más de 90 personas y aún nos faltan brazos"
El coste de las plazas en las residencias se ha incrementado a causa de la inflación. ¿Tienen previsto realizar algún tipo de actualización de las ayudas para que las residencias puedan asumir de forma más holgada estos costes?
Tenemos una cantidad estipulada en la ley de Presupuestos de la Generalitat Valenciana de 2.350 euros por cada persona que está en un centro privado. Sé que el coste ha aumentado y que se nos pide más dinero. El compromiso que yo he adquirido es trasladar esto para que esa cantidad aumente, nos hablan de 2.500. Es costoso mantener toda esta estructura. No les quito la razón. En cuanto tengamos esa financiación, nosotros encantados. No concibo un enfrentamiento entre público y privado, es una colaboración. Igual que no lo concibo entre sindicatos y la patronal, venimos a buscar alianzas, no conflictos.
¿Considera que la empresa privada es un pilar importante del modelo dada la carencia de residencias públicas?
Lo es. Allá adonde no llega lo público tiene que estar lo privado. Me fascinan las asociaciones de familiares que se han creado para poder apoyar. Si te encuentras en la vida con una situación como esta y no encuentras una respuesta pública, hay gente que ha buscado alternativas más adecuadas. Luego hay una parte empresarial que persigue un beneficio, lógicamente. De ahí el empeño del Botànic, de Mónica Oltra y actualmente de Aitana Mas, de consolidar una estructura pública que pueda ir creciendo y dando respuesta a la demanda social que existe.
¿Cómo es su relación con la patronal Aerte (Asociación Empresarial a residencias y servicios para personas dependientes)?
Nos hemos reunido con ellos, hemos establecido un calendario de respuestas. Prácticamente estamos al día en los pagos y confío en que el entendimiento sea cada vez mayor. Veo buena voluntad por su parte y espero que ellos hayan visto lo mismo por la nuestra. Desde el enfoque de colaboración confío en que nos sigamos reuniendo durante muchos años.
¿Existe una ausencia de financiación por parte del Ministerio en materia de ayudas sociosanitarias?
Es cuestión de prioridades. Para la cara del Botànic a la que yo pertenezco, Compromís, lo primordial ha sido la atención a las personas, que hemos priorizado. Eso no quiere decir que no haya que hacer otras cosas. Nos preocupa esa trastienda social que no se ve y que requiere mucha atención. El coste de nuestras personas usuarias no es que sea alto, es costoso. Cuesta mantener las condiciones dignas de estas personas. El modelo antiguo psiquiátrico ya pasó. En el modelo actual de integración y autonomía requiere muchos recursos. Si miramos la financiación, mejores recursos claro que sí hacen falta.
"No queremos hacer 'guarderías' de personas; Hay que crear los modelos cada vez más pequeños"
El futuro decreto de tipologías de la Conselleria de Igualdad limitará las plazas de las residencias de mayores y también limitará las ratios en otros espacios de servicios sociales. ¿En qué fase en la que se encuentra su desarrollo? ¿Hay alguna fecha prevista para su entrada en vigor?
No soy la persona probablemente más indicada para responder pero conozco bien el contenido. Está en la fase final de impulso, creo que hay una normativa estatal también en esta línea, en eso estamos siendo puntero también en la Comunitat Valenciana. Este decreto de tipologías pretende regular las ratios. No queremos hacer “guarderías” de personas mayores, menores ni de personas con diversidad intelectual. Entendemos que hay que crear modelos cada vez más pequeños y es posible que sea más costoso, pero aumenta la calidad de vida. No queremos tener almacenada a la gente y nuestro modelo aspiracional en la medida de lo posible serían las viviendas tuteladas, donde hay gente que les asiste pero la gente vive en su casa, hasta cuatro personas.
A comienzos de mayo la Conselleria de Vivienda anunció la creación de un registro digital junto con el IVASS para ordenar y controlar la información sobre la vivienda protegida, dada la inexistencia de una base de datos que la unificase. ¿En qué fase se encuentra el desarrollo de esta plataforma?
La Conselleria de Vivienda pide es colaboración a nuestro centro especial de empleo para digitalizar toda la documentación sobre vivienda protegida en la ciudad de València. Es de lo primero que hice al llegar. Se había negociado antes. Ellos cumplen su objetivo de digitalizar estos registros y nosotros cumplimos el objetivo de integración laboral, que tenemos el centro en Paterna.
Pero, esta plataforma digital, ¿está implementada o se encuentra todavía en desarrollo?
Desconozco los términos. Lo que está haciendo nuestro centro especial de ocupación, el CEO, es digitalizar la documentación. En cuanto a cómo está la plataforma es Vivienda quien podría responder.
¿Cuáles son las perspectivas de futuro del IVASS?
Creo que necesitamos más tiempo para que este camino quede consolidado. Realmente nosotros creemos en el modelo que desarrollamos y defendemos su gestión pública. ¿Puede haber otros modelos? No digo que no. Esto no es un dogma. Es una necesidad y gestión pública no quiere decir que todo tenga que ser público. Entendemos muy bien la externalización puntual de determinados aspectos. Pero tiene que haber una estructura pública suficiente para cubrir las demandas y complementar con la estructura privada, evidentemente. Queremos que haya atención, una buena estabilidad y tranquilidad.