VALÈNCIA. La segunda reunión de contenidos de las fuerzas que pretenden articular el Botànic II no tuvo casi nada que envidiar a la primera en materia de duración. Casi seis horas de encuentro en el que los representantes de PSPV-PSOE, Compromís, Unides Podem-EUPV se ocuparon durante buena parte del tiempo de concretar aspectos del documento programático que habían comenzado a esbozar la jornada anterior y que se sustenta en seis ejes.
Precisamente, en la primera reunión se abordaron los tres primeros: Feminismo, Cambio Climático y Transición Ecológica y Servicios Públicos. No obstante, pese a encontrarse encarrilados, esta segunda cita sirvió para repasar las modificaciones y contrapropuestas cruzadas de las distintas fuerzas políticas para cerrar estos bloques. Es decir, no se pudo avanzar en los siguientes entre los que se encuentra, conviene recordar, el de fiscalidad, que se prevé de difícil acuerdo.
Ahora bien, sin duda el principal giro del encuentro tuvo lugar en la recta final de la reunión, cuando se abordaron seriamente las cuestiones relacionadas con la arquitectura del futuro Botànic II. Así, fuentes de la negociación señalaron que Compromís se mostró favorable a que Unides Podem-EUPV pudiera ostentar una vicepresidencia segunda del Ejecutivo valenciano que recaerá en Rubén Martínez Dalmau.
Una opción ante la que tanto socialistas como valencianistas habían mostrado reticencias. En el PSPV, no obstante, señalaron que estaban dispuestos a aceptar tal petición en caso de que se crearan tres vicepresidencias -una para esta formación- y en Compromís, no existía excesivo deseo de que Mónica Oltra tuviera competencia con otro vicepresidente del Consell.
Sin embargo, las posturas se acercaron en la tarde noche de este jueves. Fuentes de Podemos apuntan a que la intención de Martínez Dalmau es la de articular una vicepresidencia 'verde' que incluya el área de Transición Ecológica. Aquí se abre el debate sobre las competencias que podrían acompañar a ese departamento: se menciona Vivienda, pero sin Obras Públicas, aunque deberá decidirse en las próximas reuniones.
Así, en el primer esbozo, Oltra seguiría siendo la vicepresidenta del Consell y liderando probablemente las políticas sociales tal y como hasta ahora, mientras Martínez Dalmau figuraría con un rango ligeramente inferior asumiendo ese rol 'verde' del Ejecutivo. Faltaría por concretar si finalmente se da luz verde a esa tercera vicepresidencia que pedían los socialistas para aceptar la pretensión de los morados. En cualquier caso, de concretarse una línea similar, sería un buen balance para la formación morada con sus ocho diputados.
No fueron las únicas cuestiones decisivas respecto a la arquitectura que se abordaron en la cita. Al margen de las vicepresidencias, el dibujo definitivo del Ejecutivo parece dirigirse hacia siete consellerias para el PSPV, cinco para Compromís y dos para Unides Podem-EUPV (7-5-2). Ahora bien, con distintos matices y variantes.
Los socialistas quieren sacar al jefe del Consell, Ximo Puig, de la ecuación dado que se perfila un sensible vaciado de competencias de Presidencia de la Generalitat. Así pues, el PSPV está dispuesto a conformar un Ejecutivo bajo la fórmula 6-4-2 más el presidente, lo que le daría una mayoría a los socialistas en el Gobierno valenciano sin necesidad de activar el voto de calidad de Puig como sí tuvo que hacer para adelantar las elecciones autonómicas.
Compromís no está de acuerdo en perder una conselleria (en la actualidad tiene cinco) dado que a juicio de la coalición han logrado un número similar de votos y solo han perdido dos escaños pese al anticipo de Puig que siguen considerando una traición. Así pues, para cumplir con el deseo de la coalición y elevarse a cinco carteras, el PSPV tiene la intención de subir una también para que siga igualado el reparto siempre con el presidente como 'extra'. Una situación que, no obstante, elevaría el total del Ejecutivo a 14 consellerias más Puig, unos números que solo se dieron en su día con el PP de Francisco Camps.
Por su parte, Unides Podem-EUPV querría alcanzar las tres carteras. Una marca que se antoja imposible, más aún cuando a Martínez Dalmau se le concederá la mencionada vicepresidencia segunda. El debate ahora se produce dentro de esta confluencia, dado que Esquerra Unida insiste en liderar la otra conselleria de la alianza mientras que la formación morada aspira a tener también el control al considerar que proporcionalmente le corresponde.