Avapace cierra su 50 aniversario agradecida por el reconocimiento social a su trayectoria

VALÈNCIA (VP). El año de su 50 cumpleaños, Avapace ha aprovechado la oportunidad para reivindicarse como una entidad de referencia en toda España. Lo es por su larga trayectoria, por su capacidad de acompañamiento a las personas con parálisis cerebral y familias y, sobre todo, por su enorme valor social. Pero también es referencia por su forma de abordar la atención a la diversidad con un formato asociativo en el que las personas atendidas, las familias y las y los profesionales buscan conjuntamente y de forma democrática las mejores fórmulas para ofrecer una vida plena para todas las personas. Un ejemplo de organización y de valores digno de ser replicado, nacido hace 50 años del impulso de una serie de familias que precisaban de atención específica para sus hijos e hijas con parálisis cerebral.

Avapace es una forma de mirar la realidad a los ojos; sin prejuicios, sin eludir los problemas y con una profunda humanidad. Así se presentó la asociación en su fiesta de aniversario y lo hizo a través de un videomanifiesto que emocionó a los presentes: familias, administración, amigas, amigos y empresas colaboradoras. Era el primer evento del año. Tras ese pistoletazo, la primavera estuvo ocupada por una serie de acciones tituladas Street Miradas en las que Avapace salió a las calles de Valencia, Albal, Bétera y Meliana ‒las poblaciones donde tiene sus sedes‒ para invitar a la ciudadanía a sentarse con las personas usuarias y compartir miradas y tejer complicidades.

Los deportes y actividades físicas también tuvieron relevancia a lo largo del año. El pabellón deportivo de la Malvarrosa acogió en junio una exhibición de boccia con grandes deportistas y, pocos días después, se celebró una sesión de yoga adaptado en el jardín del Turia, que invitó a sumarse a la actividad a los paseantes. Llegó después la Marcha Cicloturista, que este año contó como padrino al gran Miguel Induráin, quien se subió a la bicicleta para rodar con el millar de ciclistas que cada año se inscriben a la marcha para apoyar a la asociación. Y, para cerrar el año deportivo con broche de oro, el medio maratón y el gran maratón de Valencia, donde veinte integrantes del equipo de atletismo salieron un año más empujando sus carros, dando visibilidad al colectivo y reclamando participación social para todas y todos. Ya solo falta la San Silvestre de Valencia en la que Avapace es este año la entidad beneficiaria.

Con el otoño llegó el momento más intenso de las artes plásticas dentro y fuera de los museos. La calle fue el espacio elegido por el artista urbano Dridali, que se sumó a las celebraciones pintando un mural en la sede central de la asociación en el que resumió, con su estilo hiperrealista, la esencia del amor y los cuidados. El siguiente escenario fue el vestíbulo de la Estación del Norte, cedido por Adif, para exhibir una muestra fotográfica sobre el día a día de la asociación. Finalmente, el centro de arte Bombas Gens acogió la exposición "La vida en mí", en la que dos diferentes creadores ‒Dridali y Bea de Nova‒ expusieron su visión sobre el valor esencial de los cuidados.

El Congreso del Día Mundial de la Parálisis Cerebral, que cada año reúne a las diferentes asociaciones españolas del sector, se celebró los días 7 y 8 de octubre en Valencia, en el edificio Veles e Vents. Fue la manera que tuvo el colectivo nacional de participar en las celebraciones del aniversario de Avapace y mostrarle su apoyo. La presidenta de ASPACE en España y representantes de asociaciones de todo el territorio vivieron dos jornadas especialmente intensas que incluyeron una visita a las Cortes Valencianas. Allí, un grupo de trabajo fue recibido por su presidente, Enric Morera, y mantuvieron una charla con la Comisión de Estudio de Les Corts sobre discapacidad y diversidad funcional.

El apoyo de toda la sociedad a Avapace también ha quedado patente en los diferentes galardones que ha recibido la asociación durante este año. Los más mediáticos han sido una de las Altas Distinciones que la Generalitat Valenciana reserva para el gran día 9 de octubre, la Medalla de Oro de la Ciudad de Valencia y el galardón de CERMI CV, recibido el día Internacional y Europeo de la Personas Con Discapacidad. Pero la entidad también ha sido premiada por el Ayuntamiento de Meliana, la fundación Scout Sant Jordi y la Fundación Protegir de la policía municipal de Valencia. Asimismo, ha recibido sendos premios del periódico Levante -EMV y de Valencia Plaza, el Vicente Gascón de Quart y el premio solidario de CaixaBank.

En resumen, un año para reivindicarse y para celebrar que se cerró con una gran comida de hermandad en la que se reunieron personas usuarias, familias y profesionales de ayer y de hoy convencidas de que su tarea es una carrera de relevos. Un broche emotivo al 50 aniversario de una asociación que ya piensa en sus próximos desafíos y en el año 2023, año 51 de Avapace. La suma de muchas personas con un objetivo común, el cuidado de las personas con discapacidad y la lucha por sus derechos, que sigue trazando un camino que es referente para muchos otros colectivos.