La alcaldesa de Vallada, María José Tortosa, y el primer edil de L´Olleria, Ramón Vidal.VALÈNCIA. La concejal socialista de Sueca Manoli Egea ya preside la Mancomunitat de la Ribera Baixa. Lo hace tras un plácido pleno sin votos en contra que reunió apenas a una veintena de delegados de la comarca. Esta situación no se reeditará en la constitución de las entidades comarcales de la Vall d´Albaida y la Costera-Canal, con resultado incierto.
La sesión plenaria de la primera la afrontan los diferentes partidos sin tener claro qué pasara en este espacio comarcal cuna de la formación Ens Uneix, que cuenta con seis alcaldías en el total de 34 municipios. El PSPV daba por seguro que, al igual que ha ocurrido en la Diputación, el grupo que lidera el alcalde de Ontinyent, Jorge Rodríguez, pactará con el PP; desde esta última formación también preveían un acuerdo que incluso abarcara a algún partido local independiente; desde el citado Ens Uneix, continuando con su estrategia habitual de mantener la incógnita hasta el final y en vilo al resto, se encerraban en el sigilo.
En ese hermetismo se atrincheraron hasta mitad de tarde de ayer, cuando emitieron un comunicado proponiendo que Compromís y PP se alternaran en la presidencia y que el primer turno correspondiera al alcalde compromisario de Albaida, Alejandro Quilis. A partir de ahí plantean un reparto de vicepresidencias que incluya a Ens Uneix y PSPV.
El pleno de constitución se celebra hoy por la noche dentro de un hemiciclo fragmentado en la mancomunidad con más municipios de la provincia, ya que engloba a 34 que representan a un conjunto de habitantes que no llega a los 90.000. De hecho, 20 de esas poblaciones no alcanzan ni el millar de moradores.
No obstante, cuentan con los mismos votos (dos) Ontinyent, con 35.000 vecinos; y Sempere o Carrícola, dos de los tres términos municipales de la provincia de Valencia (el tercero es La Puebla de San Miguel, en el Rincón de Ademuz) con menos de cien residentes censados. Por tanto, existe una fragmentación enorme que complica las predicciones y convierte en más incierto el resultado.
Si el PP, que es quien más consejeros tiene en el ente, optara a presidir en el citado pleno la Mancomunitat de la Vall d´Albaida parte con opciones para la presidencia el alcalde de L´Olleria, Ramón Vidal, que arrasó en las últimas elecciones y logró diez de 13 concejales en el segundo municipio más poblado de la comarca tras el referido Ontinyent. También dentro del PP destacan la figura del nuevo primer edil de Pinet (población con alrededor de 150 habitantes), Gonzalo Catalá.
No obstante, desde el Partido Popular, pese a no ejercer de promotores de ese acuerdo, insisten en que "vamos de la mano con Ens Uneix", por lo que muy previsiblemente acatarán la propuesta de la formación impulsada desde Ontinyent y su candidato tendrá que conformarse con una vicepresidencia ahora y la máxima responsabilidad a partir de 2025. Por tanto, de la fragmentación podría pasarse a la unanimidad.
"Hemos sido coherentes al intentar recuperar el espíritu fundacional de consenso. Hemos roto bloques y logrado que los partidos se entiendan entre ellos. Jorge Rodríguez lo ha vuelto a hacer y demostrado de nuevo que hay otra forma de ejercer la política", resumen desde Ens Uneix, que tiene 11 consejeros mancomunales. Junto al PP sumaría 34, frente a los 28 del hipotético bloque PSPV-Compromís y los seis de grupos locales.
La Mancomunitat de La Costera-Canal (lleva este segundo apellido comarcal por incluir a Enguera, ubicada en la Canal de Navarrés) no se halla configurada por tantas poblaciones. En concreto reúne a 18. Le falta Canals, la segunda localidad en vecinos de la Costera con algo más de 13.000 tras la capital, Xàtiva. Está tramitando su incorporación, pero no llega en plazo al pleno de la constitución.
El PSPV, como ha venido relatando con detalle Valencia Plaza, tiene 17 votos asegurados. Necesita dos más para garantizarse la mayoría. Lo podría hacer añadiendo los tres de Esquerra Unida o el dueto del partido local de Torrella o de Ciudadanos en Llanera. El PP planteará batalla...después que el Partido Socialista resuelva la que tiene interna.
El exPP, exindependiente y ahora asentado primer edil del PSPV en Cerdá, José Luis Gijón, aspira a relevar a la alcaldesa de Vallada, María José Tortosa, que quiere repetir en la presidencia de la Mancomunitat. Ninguno renuncia a su ambición.
La situación ha llevado a la dirección comarcal que coordina el concejal de l' Alcúdia de Crespins, Robert Granero, a retrasar la convocatoria de una ejecutiva comarcal que dilucide. En los intentos realizados hasta la fecha no ha logrado que alguno desista.
En el caso de esta mancomunidad cuentan con la ventaja de que disponen hasta el 13 de octubre para convocar el pleno. El resto se limitaba hasta el 17 de septiembre, tres meses después de constituirse los ayuntamientos. En la Costera, debido a un recurso, el de Moixent se demoró hasta el 13 de julio. De ahí esa ampliación del plazo.
De no producirse un acuerdo, el PSPV recurriría a la fórmula que ya aplicó en la Ribera Alta de votación interna. El problema que tuvo fue que luego su candidata estuvo a punto de perder en el pleno por una fuga de votos presumiblemente descontentos con su selección. Podría ocurrir lo mismo en la Costera. El PP tiene 12 representantes y presentará batalla sobre todo si su ex, Gijón, es el candidato final del PSPV.
Las mancomunidades, entidades cada vez con más recursos y fuerza en las comarcas, siguen escribiendo capítulos de emocionante desenlace en la provincia de Valencia.
