ALICANTE (EP). La sección segunda de la sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana ha condenado a la Conselleria de Sanidad a indemnizar con 100.000 euros a una paciente a la que tardó 16 meses en diagnosticar de cáncer colorrectal pese a los síntomas que presentaba.
La sala estima de esta forma en parte la demanda de la afectada, que fue tramitada por los servicios jurídicos de la asociación 'El Defensor del Paciente', aunque considera que la indemnización más ajustada a su situación es la de 100.000 euros y no los 300.000 que solicitaba de acuerdo con las circunstancias objetivas y subjetivas de su caso. El tumor se advirtió como estadio IIIB --un adenocarcinoma moderadamente diferenciado-- con invasión ganglionar demostrada en una segunda revisión y en estadio menos grave.
Según ha explicado la asociación en un comunicado, desde el 17 de febrero de 2011 la paciente, natural de Madrid y entonces de 63 años, acudió en diversas ocasiones a la consulta de su médico de atención primaria en el Centro de Salud de Guardamar del Segura (Alicante) por fatiga y otros síntomas, motivo por el que fue tratada de anemia ferropénica.
Aunque una analítica de sangre en heces dio positivo en junio de 2011, el médico no prescribió ninguna prueba más y se limitó a tratar la anemia. La mujer, en mayo de 2012, fue atendida por otra médica en el mismo centro de salud, quien al observar su analítica de sangre en heces alertó a la paciente y solicitó por su cuenta una colonoscopia preferente que derivó en el diagnosticó de adenocarcinoma de colon moderadamente diferenciado.
La entidad señala que en agosto de ese año se sometió a la paciente a cirugía para la implantación de un port-a-cath (dispensador de quimioterapia) y el día 24/08/2012 comenzó el tratamiento. Tras diversos tratamientos, el cáncer metastatizó al pulmón, de lo que fue intervenida en diciembre de 2013, y a partir de ahí, en otras ocasiones.
La sala ha dado la razón a la demandante al considerar que el inspector médico, en su informe, concluyó que los datos disponibles no permitían descartar que el tiempo de demora en el diagnóstico final, casi un año desde el positivo de la determinación de sangre en heces, hasta el diagnóstico por colonoscopia de adenocarcinoma, no haya influido en el pronóstico de la patología. Asimismo, en el informe forense se hacía consta un retraso de 16 meses en el diagnóstico, lo que que no sigue la lex artis.
Durante la tramitación de este procedimiento judicial, y "ante la gravedad de la negligencia y la falta de excusa del médico", se presentó querella contra él, que dio lugar a la apertura de diligencias previas penales en el juzgado de instrucción 5 de Torrevieja, que concluyeron con informe del médico forense que establecía la mala praxis, ha explicado la asociación.
Por ello, se presentó acusación tanto de Fiscalía como de la paciente contra el facultativo por un delito de lesiones por imprudencia profesional. El juicio estaba pendiente de señalamiento ante el juzgado de lo penal 2 de Orihuela, pero el acusado falleció en agosto de 2016, se archivó la causa y se reactivó el procedimiento contencioso administrativo, según la entidad.