VALÈNCIA. Siguiendo con las entrevistas a financieros valencianos en estos tiempos de confinamiento obligado por el coronavirus, el protagonista en esta ocasión es José Gregori, gestor de Egeria Activos, que atendió amablemente la llamada de este diario.
A continuación la charla mantenida con Gregori para conocer sus impresiones no solo de cómo está viviendo el confinamiento sino también, y entre otras cosas, de su visión sobre la marcha de los mercados financieros.
-¿Qué tal está llevando estas semanas de confinamiento y la que nos esperan?
-Mejor de lo que pensaba porque procuro no darle muchas vueltas al tema y reconozco que no veo la televisión, lo cual estoy convencido de que me ayuda. A nadie nos gusta que nos digan lo que tenemos que hacer y menos que nos restrinjan la libertad, pero parece que la falta de previsión del Gobierno central y del autonómico no nos ha dejado otra opción. El colapso del sistema sanitario es incuestionable y lo primero es la salud porque la vida es el bien más preciado que tenemos.
-¿Cómo se organiza para seguir al pie del cañón?
-Hoy en día gracias a las fantásticas telecomunicaciones que tenemos en España es fácil seguir conectado. En mi caso trabajo por la mañana desde casa, y por la tarde voy a la oficina. Aunque tenemos despachos individuales, hemos establecido turnos, con lo que sólo hay una persona en la oficina. Lo cierto es que el teletrabajo cuando se tienen niñas pequeñas -como es mi caso- es complicado en el confinamiento. En España, a diferencia de los países nórdicos, no tenemos políticas que faciliten la conciliación familiar. Y supongo que ahora ya no llegarán… Quizás en algún momento algún gobierno se preocupe por hacer políticas sociales pensando en las familias con niños.
-¿Cómo está respondiendo Egeria Activos ante la crisis sanitaria?
-Con responsabilidad. Se han adaptado equipos y material para que todos podamos trabajar desde casa y dispongamos de todos los medios necesarios para ello; además de haber establecido protocolos de actuación pensando en la salud de todos y en el servicio que tenemos que continuar dando. El cliente sigue siendo en estos momentos -también como no podía ser de otra forma- el centro de nuestros esfuerzos; el nivel y calidad del servicio que prestamos no tiene que verse afectado sino al contrario, dado que procuramos redoblar nuestros esfuerzos para estar 'más cerca' del cliente si cabe.
-¿Recibe muchas llamadas estos días de clientes ante las sacudidas en los mercados y qué les trasladan?
-Procuramos estar en permanente contacto con los clientes siempre, pero qué duda cabe que en estos momentos de tensión donde la sensibilidad está a flor de piel comentar la situación y estar en contacto con los clientes es fundamental. Además de las caídas bursátiles, los medios de comunicación nos bombardean con noticias apocalípticas y es necesario poner las cosas en contexto, analizar con calma la situación, quitarle emotividad e intentar ver las cosas con perspectiva. Les intentamos trasladar tranquilidad; la situación actual puede ser un buen punto de partida para incrementar la inversión pensando en el largo plazo.
-¿Qué recomendaciones les da?
-Partimos de una situación en la que cada cliente está con la inversión que requiere su perfil, en este sentido no debería haber tensión ni intranquilidad. No obstante, se analiza la situación de cada cliente de forma individualizada. Algunos pueden verse afectados por la crisis de la covid-19 en su trabajo/industria -como por ejemplo un hotelero-, y en este caso habría que extremar la prudencia. En cambio los que no se vean tan afectados, o incluso se vean beneficiados, pueden aprovechar las oportunidades que estamos viendo en renta variable o crédito en la parte de renta fija, para incrementar las posiciones, pero eso sí siempre dentro de su perfil.
-¿Dónde se van a frenar los descensos en bolsa tras las medidas adoptadas por los grandes bancos centrales?
-Predecir el suelo de mercado es una tarea imposible, nadie sabe dónde está hasta que ya ha pasado. Es posible que ya lo hayamos visto -y que el 23 de marzo fuera el mínimo-, eso el tiempo lo dirá. Todavía no podemos descartar que una nueva corrección nos lleve a nuevos mínimos. A todos nos gusta pensar que lo peor ya ha pasado, pero no podemos asegurarlo.
-¿Atisba una fuerte recuperación económica una vez pase el 'efecto coronavirus'?
-Recuperación va a haber, de eso no cabe duda; y efectivamente las medidas de estímulo monetario de los bancos centrales y fiscal por parte de los gobiernos van a ayudar. Pero no va a ser un camino de rosas, esto no es algo que se vuelva a poner en marcha 'apretando un botón', el parón económico está siendo importante y reconectarse va a costar. Si empezamos a salir de casa, reincorporándonos al trabajo ya -aunque de forma progresiva por sectores-, y el confinamiento se acaba pronto la recuperación bursátil sí debería ser importante. En cuanto a datos macroeconómicos (PIB, empleo...) 2020 va a ser un mal año, pero en 2021 se debería recuperar gran parte de lo perdido. En junio posiblemente tengamos una visión más clara de si la recuperación va a ser en 'V' o no. Lo cierto es que nos preocupa el efecto que pueda tener esta crisis en el empleo.
-¿Nos queda mucho para seguir en esta situación?
-Ojalá lo supiera (sonríe). Dependerá en gran medida del control del virus y de las medidas que adopten los gobiernos. Ahora todos los estados en Europa están planeando la salida de este periodo de confinamiento, que según parece será progresivo. Tenemos la ventaja de no ser los primeros en haber pasado la epidemia de la covid-19, mientras la zona asiática está volviendo a la normalidad. Debemos analizar tanto sus errores -con el fin de evitarlos- como también sus aciertos para aprender de ellos. Lo primero que se debería -esta es una opinión personal- es saber quién se ha infectado y, por tanto, tiene los anticuerpos, lo que implica hacer test masivamente. A partir de ahí podemos saber donde estamos porque las cifras actuales dicen poco.