VALÈNCIA. Carlos Mazón y el PP nacional quieren intentar llevar la delantera en el relato de los pactos tras las elecciones del 28 de mayo, en las que han resultado vencedores en la Comunitat Valenciana al igual que en otros territorios. La estrategia del PSOE pasa por atacar con los previsibles acuerdos entre los populares y Vox, pero los primeros quieren evitarlos antes de los comicios generales del 23 de julio. De ahí que la táctica del líder del PPCV vaya a ser la de pedir a los socialistas que le permitan gobernar en solitario. En caso contrario, significará que le empujan a buscar apoyos alternativos y estará legitimado para negociar con Vox.
La misma noche electoral, Mazón anunció que se dirigiría al resto de formaciones políticas para tratar de "garantizar un gobierno estable y eficaz". Lo haría por orden de representación parlamentaria según el resultado del 28M. Es decir, el PSPV, Compromís y Vox. Los primeros serán los socialistas y la intención del líder de los populares es citarse con el actual presidente de la Generalitat, Ximo Puig. Pero éste sopesa no acudir en primera persona.
Mazón y otros miembros de la dirección del partido celebraron este lunes una reunión interna en la sede, ya con los resultados oficiales en la mano. Después del encuentro, desde la formación hicieron público un calendario de inicio de negociaciones: el próximo jueves 8 de junio –y no hoy martes como se dijo en un primer momento– con el PSPV; el lunes 12 con Compromís; y el martes 13 con Vox. "Se sigue así el orden de mayor a menor representación parlamentaria establecido por el pueblo valenciano en los pasados comicios", expresó el PPCV en un comunicado.
Las reuniones tendrán lugar en Les Corts Valencianes a las 10 horas y, para celebrarlas, Mazón ha enviado cartas a los dirigentes de los tres partidos: Ximo Puig (PSPV), Joan Baldoví (Compromís) y Carlos Flores (Vox). A todos ellos los ha emplazado a un encuentro "con el objetivo de abordar los retos y oportunidades del futuro de la Comunitat Valenciana". Los dos últimos seguramente respondan que sí que irán.
Aunque el líder del PPCV es quien presidirá las citas, irá acompañado del vicesecretario de Organización del partido, Juan Francisco Pérez Llorca, y del director de campaña, Miguel Barrachina –a quien muchos ya ven como nuevo portavoz en Les Corts–.
Los populares han coqueteado con el ejecutivo en solitario para evitar tener a Vox de socio y el propio Mazón ha destacado públicamente su método de negociación en la Diputación de Alicante, donde ha llegado a pactar los presupuestos con los socialistas e, incluso, con Compromís. Aunque parece mucho más complicado que lo logre en la Generalitat, el hecho de sentarse a negociar supone mantener una estrategia pública de, al menos, intentarlo.
De ahí que la idea, como ha venido informando Valencia Plaza, sea pedirle a Puig la abstención para su investidura el próximo jueves. Unida al voto favorable o a otra abstención de Vox le permitiría que saliera adelante. El hasta ahora presidente de la Generalitat, en declaraciones a los medios este lunes, se mostró "dispuesto a dialogar" entre fuerzas políticas porque es "fundamental en democracia". Así, afirmó que los socialistas no tendrían "ningún problema" en departir con los populares al tratarse de "la fuerza política que ha tenido un mayor apoyo de los ciudadanos".
Ahora bien, Puig no habló sobre sí mismo sino sobre el PSPV, y tampoco se comprometió a sentarse con Mazón. De hecho, fuentes socialistas señalan que acudirán a la cita, aunque otra cuestión es quién vaya. Con ello ya dejan entrever que es posible que no lo haga Puig, sino una delegación del partido. El hecho de que no sea un cara a cara con el líder del PPCV –que asista acompañado– parece que no ha agradado demasiado y haya sido interpretado como que las intenciones de los populares de negociar no son reales. En definitiva, que lo ven un "teatro" cuando su voluntad verdadera es llegar a un acuerdo con Vox. En todo caso, desde el PSPV remarcan que en ninguno de sus planes entra la abstención y que Puig estudiará su asistencia las próximas horas.
El encuentro con –quien sea– del PSPV se producirá un día después de la visita del líder nacional, Alberto Núñez Feijóo, a València para celebrar un acto de agradecimiento a interventores y cargos del partido por su implicación en la campaña. En un territorio en el que los populares han obtenido 40 de 99 diputados en Les Corts, Feijóo seguramente insista en el mismo discurso del gobierno en solitario. Recientemente, de hecho, pidió directamente a Vox que les dejara gobernar en la Comunitat por su victoria clara.
Santiago Abascal, sin embargo, no está en la misma onda que el PP. Este mismo lunes urgió a Feijóo a constituir los gobiernos autonómicos antes de las elecciones generales del 23 de julio con la "mano tendida" y la única línea roja de "respeto" a sus votantes. Con ello, Vox, tanto a nivel nacional como en la Comunitat, evita poner condiciones y trata de parecer un socio razonable para los populares, sin salidas de tono.
Pero resulta evidente que Mazón, y el PP en toda España, juega con el calendario. De hecho, como ha publicado este periódico, y si no salen las cuentas, no es descartable que el líder del PPCV se la juegue a enfrentarse a una investidura fallida la semana de las generales para celebrar la definitiva después. La primera gran fecha será la constitución de Les Corts en 26 de junio, donde se comenzará a materializar la estrategia con la presidencia del Parlamento autonómico.