VALÈNCIA (EP). El PSPV sale con buenas sensaciones de las comisiones que han negociado la ponencia del 40 Congreso del PSOE al incluir su propuesta de abolición de la prostitución, evitar que se descarte el trasvase Tajo-Segura y acordar un texto que prima la población en la postura socialista frente al nuevo modelo de financiación autonómica.
De hecho, el texto que han consensuado entre todas las federaciones plantea aprobar un "sistema de financiación basado en la ciudadanía y que tenga en cuenta el coste real de la prestación de servicios".
Según han explicado fuentes socialistas, no se ha votado ninguna de las enmiendas presentadas. No obstante, los valencianos han mostrado su optimismo porque consideran que han influido en la redacción final. En este sentido, han incidido en que el nuevo modelo deberá responder a los criterios de suficiencia, de solidaridad interterritorial y equidad.
"Las comunidades autónomas necesitan fondos suficientes para acometer las inversiones necesarias de política regional como palanca para la recuperación", reza el texto, que también destaca que hay territorios "condenados a una situación de infrafinanciación que les obliga a destinar un porcentaje muy elevado de sus recursos a los servicios fundamentales, quedándose sin margen para implementar políticas de desarrollo regional que puedan ser palanca de recuperación".
Otro de los puntos que remarca la delegación valenciana es que la redacción final del texto incluye una coletilla respecto al nuevo modelo: que se debe "alcanzar a la mayor brevedad posible un acuerdo político" para cambiarlo.
Dos conceptos que han defendido los socialistas valencianos, no obstante, no aparecen en la redacción final. Ni la deuda histórica ni la población ajustada para el modelo de financiación no están explícitamente en el texto, aunque consideran que sí se reflejan implícitamente en el texto.
Por otra parte, los socialistas valencianos han forzado que se rechace una propuesta de Castilla-la Mancha que pedía derogar el trasvase Tajo-Segura. Esta infraestructura no consta explícitamente en el texto final, pero sí se hace referencia a que se mantengan los recursos actuales.
Otro de los acuerdos que permite a la delegación valenciana sacar pecho es la inclusión de su propuesta sobre la abolición de la prostitución. De hecho, el PSOE se va a comprometer en la ponencia marco de su 40º Congreso a hacer "el esfuerzo" de impulsar este legislatura una ley abolicionista de la prostitución que incluya medidas concretas de sanción a los clientes.
Por su parte, el 'president' de la Generalitat y presidente del 40 Congreso Federal del PSOE, Ximo Puig, ha confiado en que del cónclave salga un acuerdo que permita al Gobierno presentar "lo más pronto posible" el nuevo sistema de financiación autonómica. "Estamos muy satisfechos", ha manifestado.
Puig ha valorado así las enmiendas que se debaten este sábado para la ponencia marco del congreso, como las presentadas por el PSPV contra la infrafinanciación de la Comunitat Valenciana. La financiación es objeto de debate por las discrepancias entre presidentes autonómicos y la reunión convocada por el gallego, Alberto Núñez Feijóo (PP), a ocho de ellos, varios socialistas.
"La financiación va por la vía correcta", ha garantizado el 'president' a los periodistas, insistiendo en que el nuevo modelo cumpla el precepto de la Constitución de que todos los españoles son iguales en la prestación de los servicios públicos.
Sobre si el nuevo modelo será realidad esta legislatura, Puig ha afirmado que "la idea es que sea posible esa reforma", pero ha reiterado que no depende "ni del PSOE ni del Gobierno" y que es necesaria una mayoría suficiente tanto en el ámbito territorial como en el Congreso de los Diputados.
Lo fundamental, ha defendido, es que la reforma se base en la "confianza federal" y en la "empatía con el espacio más próximo o lejano". "No se trata de un sistema de perdedores y ganadores ni de confrontación: España tiene que coserse bien", ha reivindicado.
Por otro lado, respecto al compromiso del PSOE de impulsar esta legislatura una ley abolicionista de la prostitución, Puig ha destacado que es un "paso extraordinario" para el PSOE porque lo ve como el último síntoma de la pervivencia de la esclavitud: "Ningún país decente puede permitirse que exista".
A su juicio, este acuerdo fruto de otras enmiendas del 40 Congreso habla de la decencia de España, "siempre dando pasos adelante a favor de las libertades en los últimos años". Y "por supuesto", ha garantizado que habrá sanciones para quienes prostituyen porque se trata de proteger a las víctimas y "castigar a los culpables: a los consumidores y a los proxenetas".
Tras garantizar el compromiso de que sea realidad esta legislatura, Puig ha remarcado que esta ley abolicionista se enmarca en "el perímetro del PSOE" y que el apoyo de los socios de Unidas Podemos es algo que corresponde al Gobierno, aunque espera que cuente con la mayoría suficiente.