VALENCIA (EP). El secretario autonómico de la Conselleria de Sanidad Universal, Narcís Vázquez, ha señalado este miércoles que "el mantra" que defienden las concesionarias con el apoyo del PP de que la gestión pública es "más cara" que la privada, 140 euros más por persona al año, es "una falacia" que "se sustenta en tener un 21% menos de plantilla -como indica la Sindicatura de Comptes-, con peores condiciones laborales" y en no asumir el coste de los servicios más caros como las prótesis, los trasplantes o el transporte sanitario.
Vázquez ha comparecido en la comisión de Sanidad de las Corts, a petición propia, para explicar las consecuencias del fin del contrato con Ribera Salud, gestor del hospital de Alzira, y al respecto ha lanzado "un mensaje de tranquilidad" al garantizar que el 1 de abril, cuando se haya revertido la concesión, se prestará "una mejor calidad asistencial porque se ampliarán los servicios y la plantilla y los trabajadores tendrán mejor régimen laboral".
En ese sentido, ha recalcado que la reversión del Hospital de Alzira es "una decisión política del Gobierno que está tomada" porque "el derecho a salud no casa bien con márgenes de beneficios empresariales".
En concreto, ha explicado que el coste de la atención por persona/año en la sanidad de gestión privada es de 777 euros frente a los 916 euros de la pública , lo que supone unos 140 euros menos. No obstante, ha aclarado que las concesionarias no abonan el coste de algunos de los servicios más caros como las prótesis, los trasplantes, el transporte sanitarios, ni el tratamiento de última generación contra la hepatitis C, que son asumidos por la Conselleria de Sanidad.
Además, ha señalado que Alzira cuenta con un 21% menos de personal y cada profesional trabaja al año unas 200 horas más, un mes más que en la pública y con menor sueldo salvo "algunos fichajes". "La eficacia del servicio con una cápita con menos personal es difícilmente equiparable", ha cotejado Vázquez, que ha matizado: "No estoy diciendo que funcione mal sino en unas condiciones que permite a la empresa ganar dinero".
Por contra, ha asegurado que, tras la reversión, el Hospital Ribera, tras la reversión, "seguirá funcionando como hoy, con la misma cartera de servicios, que en un futuro se ampliará, y con el mismo personal, que se verá ampliado". Al respecto, ha señalado que la comisión está trabajando en la hoja de ruta y que a finales de marzo o principio de abril se darán a conocer todos los detalles, incluido el nuevo régimen laboral que se va a establecer. En cualquier caso, ha asegurado unas mejores condiciones laborales. Además, ha recordado que el 6 de febrero se abrirá la bolsa de trabajo con "los criterios de igualdad, capacidad y mérito".
Vázquez ha reprochado que el PP impuso el modelo Alzira en 1999 "sin consultar y sin llevarlo en su programa" y que tres años más tarde "tuvo que rescatar la concesión" ante las "pérdidas notables que se resolvieron ampliando el contrato a la atención primaria". La concesionaria, ha recordado, "se vio beneficiada con 70 millones por la conselleria de la época".
Y hasta ahora ha apuntado que persisten "los problemas de personal y asistenciales". "Pero esta situación se va a revertir absolutamente", ha incidido. Así, ha resaltado que la Conselleria ha cumplido "estrictamente" la legalidad al comunicar un año y medio antes de la finalización del contrato que no se prorrogaría, más de medio año antes de lo que marca la ley, porque en "la ideología" de los partidos que sustentan el Pacto del Botánico está "la defensa de lo público por encima de la privado".
Vázquez ha replicado, ante las críticas del PP y C's, que no tienen "autocomplacencia" porque "queda mucho trabajo por hacer" y se enfrentan a "un enemigo fuerte con muchos recursos económicos, jurídicos y trampas por hacer". En ese sentido, se ha referido a que "día a día" se publican "nuevas denuncias por oscuras irregularidades en la facturación de las urgencias, por el cobro de comisiones de la central de compras de Ribera salud B2B y quejas de pacientes y profesionales".
Por su parte, la diputada del PP Mº Remedios Yañez ha replicado que "al ciudadano no le importa quién es la titularidad sino que le traten rápida y bien" y ha recalcado que los 1.500 profesionales de la Ribera necesitan "saber ya qué va a pasar con ellos".
Al respecto, ha señalado que las declaraciones del dimitido comisionado José Sanfeliu sobre "la colocación de amigos y familiares en la bolsa de trabajo demuestran la demagogia y la falta de ética". "Al final la reversión es para ofrecer mejor servicio o es por una ideología sectaria para colocar personas con su misma ideología y crear una red clientelar agradecida y sumida", ha cuestionado.
Del mismo modo, Juan Córdoba, de Ciudadanos, ha lamentado que Vázquez haya expuesto un "panorama francamente optimista, que no sabemos si se va a poder cumplir" porque la Conselleria está con "recursos limitados y reservas agotadas".
Córdoba ha señalado que el modelo Alzira ha funcionado "desde la opacidad y falta de control pero con la prestación de servicio garantizada" y ha pedido poner "las auditorías encima de la mesa antes de adoptar decisión anticipadas".
Por su parte, los diputados del PSPV Ignacio Subías, de Compromís Isaura Navarro, y de Podemos Daniel Geffner han dado su apoyo a esta reversión para que "se deje de explotar a los trabajadores y se haga negocio a costa del dinero de los valencianos", ya que la prima para Ribera Salud tiene un 7,5 de tasa interna de rentabilidad asumida, y la sanidad vuelva al sistema público "no solo por eficacia sino por justicia social".