VALÈNCIA. El mercado de los productos ecológicos coge músculo. La cadena de supermercados catalanes Veritas y la valenciana Ecorganic han sellado una alianza para conquistar este sector de la alimentación que cada vez aglutina más adeptos con el fin de erigirse como el grupo líder en España. Una relación forjada para aunar esfuerzos y conseguir llegar a zonas donde todavía existe un vacío de tiendas especializadas en este sector de la alimentación.
La operación se ha cerrado con la compra de los catalanes de su competidor Ecorganic que, a cambio, entrará a formar parte del accionariado de Veritas, según explica a este diario el responsable de la cadena valenciana, Pello Aizpuru, quien puntualiza que ambas sociedades van a coexistir operando con las dos marcas de forma independiente. "En la Comunitat seguiremos abriendo como Ecorganic y ellos lo harán como Veritas en sus zonas de referencia. En otros puntos dependerá de la conveniencia de tener uno u otro", puntualiza.
La cadena de supermercados valenciana nació en el año 2006 con la apertura de su primera tienda en Blasco Ibáñez. Un concepto de supermercado enfocado a productos ecológicos que buscaba abrirse un hueco en un mercado que en ese momento acaparaban pequeñas tiendas especializadas y herbolarios. Su fundador Diego Alamar no era ajeno a este sector. Estuvo casado con una de las hijas de José Navarro, actual director general de la histórica empresa familiar Herbolario Navarro. No fue hasta 2011 cuando Pello Aizpuru y su mujer Elisabeth Hofmann deciden apostar por la compañía y entrar inyectando capital en una coyuntura de crisis económica que había dejado a la compañía en una situación complicada financieramente.
"Cuando entramos la idea era ser accionistas, pero no teníamos ningún interés ni habíamos hablado de quedarnos con la gestión. Las cosas fueron muy difíciles al principio, el día a día no funcionaba bien y acumulábamos muchas perdidas", recuerda. Poco tiempo después, Alamar se desvinculó del proyecto y el matrimonio acabó haciéndose con el control del negocio. Con esas aportaciones de capital abrieron su segunda tienda en Plaza de España. Comenzó lo que sería la expansión de la cadena que en la actualidad cuenta con seis tiendas repartidas por diferentes puntos de la Comunitat y otra en Bilbao y un equipo humano formado por 80 personas. Su oferta está formada por más de 6.000 referencias, carnicerías al corte, compra a granel, desde frutos secos, legumbre y algas y fruta y verdura de cercanía.
"Ha sido una historia de éxito. Lógicamente sufrimos mucho porque entramos en plena crisis y el mundo de la distribución es muy complejo porque cuando eres pequeño no generas tanto como para expandirte con nuevas aperturas de tiendas que suponen fuertes inversiones, pero hemos sido bastante atrevidos porque veíamos oportunidades de negocio", afirma Aizpuru. Y es que cada vez más las grandes cadenas de distribución se han sumado a la 'fiebre' de la alimentación ecológica con incorporaciones de referencias y líneas propias, un escenario que llevó a Ecorganic a replantearse la necesidad de aunar esfuerzos de la mano de un socio estratégico para poder dar la batalla en un mercado cada vez más competitivo.
"Hace unos años la distribución de la alimentación ecológica estaba en manos de las tiendas especializadas, herbolarios o supermercados como el nuestro, pero comenzó la irrupción en el sector ecológico de las grandes cadenas como Aldi, Lidl o Consum y fue entonces cuando vimos lo importante que es la economía de escala. En septiembre de 2018 vimos claro que necesitábamos fortalecernos y encontrar algún socio que nos acompañara en el camino", indica.
Tras casi un año de búsqueda, surgió el "flechazo" con Veritas, una compañía con la que comparten valores y filosofía. "No queríamos aliarnos con cualquiera porque hay mucha gente que está en el sector 'bio' por conveniencia porque ven negocio. Nosotros somos muy coherentes en la forma en cómo vivimos, cómo nos alimentamos y lo que hacemos y era muy importante que nuestro socio tuviera este perfil. En Veritas hemos encontrado sintonía, filosofía, volumen y calidad humana. Es el socio ideal", subraya Aizpuru.
La compañía catalana nació en 2002 y en la actualidad cuenta con más de 55 establecimientos en diferentes puntos de España e incluso Andorra. Aunque su principal área es Cataluña, también tiene tiendas en Madrid, Baleares o Navarra. Su surtido incluye más de 4500 productos con certificación de producción ecológica, de los cuales 400 son marca Veritas. Forman la compañía más de 400 personas entre personal de tienda y oficina.
Ecorganic basa su filosofía no solo en la venta de un producto, sino en promover un estilo de vida. "No abrimos los domingos para fomentar la conciliación familiar e intentamos comprar al mejor precio posible para no ahogar al proveedor. Queremos ser coherentes porque cuando lo vives también lo transmites y el consumidor eso lo percibe", subraya su responsable, quien considera que son muchos los que se están subiendo al carro del éxito progresivo de alimentación ecológica. "Hay un marketing detrás porque queda muy bien, pero la realidad es que faltan valores. En muchas grandes corporaciones se está jugando a la confusión. Ahora salen conceptos nuevos como 'natural' o 'residuo cero' que no demuestran nada. Son historias que se sacan para confundir al consumidor. No lo critico porque cada uno hace lo que puede y quiere, pero pensamos que no solo es vender, sino también educar", defiende. De hecho, la cadena organiza charlas y cursos y cuenta con un restaurante ecológico y vegano en la ciudad de València, Miobio.
La empresa valenciana, que el pasado año facturó 10 millones de euros y prevé cerrar este ejercicio con un crecimiento de sus ventas del 4%, acomete este unión con Veritas con perspectivas de crecimientos y expansión "como mancha de aceite" por otras zonas de España donde todavía falta una buena oferta alimentación ecológica. También su objetivo pasa por aumentar su presencia en la Comunitat donde hay una sólida cultura por el consumo 'bio' con importantes operadores como Herbolario Navarro. "Somos modelos diferentes y compatibles. Nosotros somos más supermercado y ellos, herbolario. Convivimos bien", apostilla.
El responsable de Ecorganic considera que en este momento el sector de la alimentación ecológica está en "una situación crítica" porque hay zonas en España como Cataluña, Comunitat, Baleares o País Vasco en donde se puede comprar en tiendas especializadas, acudir a las cadenas de gran distribución o ir a las dos, frente a otros puntos donde es inexistente esa oferta. Así, sus ojos se han fijado en autonomías como Andalucía, Murcia e incluso la capital española, donde considera que hay un importante nicho de mercado por cubrir. "Esta alianza irá encaminada a explorar nuevos sitios y entrar en esos mercados", señala. Asimismo, estiman llegar a los 100 millones de facturación conjunta este año.
Sin embargo, su horizonte más cercano es la apuesta por la digitalización y la consolidación de la venta online. "Tenemos hitos importantes como mejorar márgenes para ofrecer en algunos casos mejores precios, conseguir una fortaleza económica y apostar por la digitalización a través de la venta online y alguna aplicación de comunicación. Queremos que el consumidor tenga la mejor experiencia de compra", concluye.
La cadena escoge el País Vasco para su primera incursión en otra comunidad autónoma. También abrirá un nuevo establecimiento en Ondara (Dénia)