Almussafes moverá ficha la semana que viene tras el silencio de Ford Alemania sobre su oferta 

VALÈNCIA. Almussafes moverá ficha la próxima semana y dará a conocer el acuerdo alcanzado con la dirección europea para optar a los futuros modelos que Ford lanzará al mercado europeo. Hace ya una semana que UGT, sindicato mayoritario en la factoría, selló con los máximos dirigentes de la multinacional en Europa una propuesta de ajustes para conseguir la electrificación de la planta, pero los detalles se guardan con celo. Un mutismo motivado por la fuerte competencia que existe con la planta alemana de Saarlouis, que también aspira a adjudicarse la futura carga de trabajo. 

Los alemanes no han desvelado su propuesta, pero sí han exhibido un potente frente común de todas sus plantas de Ford en el país en torno a Saarlouis. Así, tras una gran pancarta roja bajo el lema 'Solidaridad en la ofensiva', representantes sindicales subrayaron este miércoles en rueda de prensa que van todos a una y su plan de ajustes afecta a los cerca de 20.000 trabajadores de Ford en sus tres plantas: dos en Colonia y la de Saarlouis. Un movimiento, fraguado hace meses, con el fin de compensar sus mayores costes laborales con recortes sobre más plantilla. 

Eso sí, sobre los detalles de su oferta, la respuesta fue el silencio por la gran competencia existente. Y es que, como llegaron a reconocer, hay aspectos de su propuesta que todavía podrían perfilarse. En Almussafes se esperaba esta convocatoria ante los medios para dar un paso adelante esta misma semana, pero ante el secretismo en Alemania han optado por esperar unos días más. 

Las reservas de los alemanes de desvelar su propuesta han llevado a UGT Ford a guardar un silencio estratégico para no dar ventaja a Saarlouis sobre su oferta. Y más, cuando Ford podría pedir aclaraciones para pedir alguna concreción. De ser así, un paso adelante podría dar pistas y derivar en una batalla de contraofertas. Un escenario que se quiere evitar a toda costa.

Por tanto, será la próxima semana cuando se reunirá la Comisión Negociadora del Acuerdo por la Electrificación para dar a conocer al resto de sindicatos -CCOO, CGT y STM- los ajustes pactados. Una convocatoria todavía sin fecha y solicitada por UGT, en la que el sindicato mayoritario quiere buscar apoyos para demostrar a Ford que existe cohesión en la fábrica y dar también una imagen de unión para salvar la planta.

"Atravesamos momentos en los que se hace necesario transmitir unidad desde Valencia y presentar un acuerdo que sea respaldado por el 100% del Comité de Empresa", subrayaba UGT en un comunicado hace unos días. "Creemos firmemente que este acuerdo es la única vía de esperanza para la planta de Almussafes, puesto que una vez finalizadas las negociaciones solo queda esperar a la decisión que tome la multinacional desde Detroit", insistía el sindicato.

El futuro de las instalaciones valencianas y de toda una industria valenciana es lo que hay en juego. Y la pugna entre Saarlouis y Almussafes encara ahora cinco meses decisivos hasta que Ford tome en junio la decisión final. La presión de los alemanes inquieta. Ese era también el objetivo: ganar ventaja a Almussafes. "Nos han dicho con bastante claridad que Valencia tiene ventajas significativas sobre nuestra planta de Saarlouis, especialmente en términos de costes de personal. Esta es una de las razones por la que nosotros nos hemos unido con los Comités de Empresa de las otras plantas en Alemania", aseguraba hace unos meses Martin Henning, presidente del Comité de Empresa de Ford en Alemania en una carta remitida a los trabajadores. 

"Estamos todos los compañeros de Alemania juntos para salvar Saarlouis. Hemos informado a la dirección europea de que en Alemania vamos juntos a competir. Saarlouis por sí sola no tendrá ninguna oportunidad en esta competencia desigual y solo podremos lograrlo si trabajamos juntos", señalaba Henning en su misiva a la plantilla.

Y es que la multinacional del óvalo ya ha dejado claro que en esta pugna Almussafes-Saarlouis solo una se hará con los nuevos modelos eléctricos que Ford lanzará al mercado europeo a partir de 2025. La que pierda tendrá serias dificultades de viabilidad, porque ambas plantas precisan nueva carga de trabajo. Saarlouis, porque en tres años dejará de producir el modelo Focus, el único que produce. Y Almussafes, porque en 2024 se habrá quedado sin cuatro de los cinco modelos que ahora fabrica y solo tendrá el Kuga. 

Por tanto, la adjudicación de los nuevos modelos es vital para la supervivencia de ambas instalaciones. Ford ya ha comunicado de forma explícita que solo puede quedar una porque la futura carga de trabajo no permitir´ sostener ambas plantas. Ahora, habrá que esperar cuáles son los siguientes movimientos. Por lo pronto, Almussafes la próxima semana dará el siguiente paso.