VALÈNCIA. El Ayuntamiento de València tendrá que adquirir dos parcelas más en el entorno de la nueva glorieta de Blasco Ibáñez, en el cruce con la avenida de Serrería. Las obras de construcción para retocar el final de la gran avenida en su encuentro con el barrio del Cabanyal, que incluyen una nueva rotonda y un gran jardín, se iniciaron el pasado mandato pero todavía quedaban por adquirir dos inmuebles. El consistorio estudia cómo hacerlo.
El pasado mayo de 2023, el gobierno municipal, dirigido todavía por PSPV y Compromís, adjudicó las obras para llevar a cabo este proyecto con un presupuesto de más de 5,3 millones de euros, cofinanciados con los fondos europeos Edusi, y que tenía un plazo de ejecución aproximado de ocho meses y medio. Sin embargo, la actuación se inició sin que el consistorio hubiera expropiado todos los terrenos necesarios. Faltaban dos parcelas.
Se trata de dos edificaciones de planta baja ubicadas en los números 23 y 25 de la calle Joan Mercader, paralela a la vía de Serrería. Precisamente los socialistas, cuya portavoz Sandra Gómez dirigía la concejalía de Urbanismo el pasado mandato, preguntaron el pasado mes de abril a dicho departamento, dirigido ahora por el edil popular Juan Giner, si había "iniciado expediente de permuta, compra, expropiación o alguna otra fórmula para obtener la propiedad" de estos suelos y así "ejecutar el jardín en su totalidad".
La respuesta del departamento de Urbanismo fue lamentar "que se iniciaran estas obras sin que la anterior corporación municipal ni los responsables de Urbanismo hubieran resuelto la obtención de la propiedad para ejecutar en su totalidad el proyecto". En ese sentido, la empresa pública participada por el Ayuntamiento Plan Cabanyal está "trabajando para resolverlo", según explicaron a los socialistas desde la concejalía.
Hay varias fórmulas para adquirir este suelo, como ya explicaba la propia pregunta de los socialistas. Una de ellas sería llevar a cabo una permuta, dando a los propietarios suelo por el mismo valor que el que se queda el Ayuntamiento en el entorno de la nueva glorieta, donde se encuentra la estación de Cercanías de Adif. Sin embargo, si esta fórmula no llega a buen puerto, algo poco previsible, el consistorio tendrá que acabar ejecutando la expropiación de ambas parcelas.
Cabe recordar que el proyecto para la remodelación de este extremo de Blasco Ibáñez contemplaba una gran zona verde alrededor de la estación de Adif y para todo ello, se está desplazando la glorieta que regía la circulación en este punto hacia el oeste, acortando así la gran vía y dejando a un lado la estación de Adif, rodeada del nuevo jardín. También se proyectaba una nueva plaza, un nuevo carril-bici conectado al actualmente existente en la calle de la Serrería, la reposición del pavimento y las aceras, la ampliación de alcorques y una mejora de la accesibilidad.