VALÈNCIA. “Tomando el espacio del fracaso como punto de partida, la propuesta intenta desarrollar una estructura de trabajo abierta e intuitiva que contenga diferentes niveles de acercamiento. Una pared que se pueda escuchar, que contenga el ruido del barrio, de su historia y de sus habitantes”. El Institut Valencià d’Art Modern (IVAM) presentó ayer el esperado mural de Escif, una obra que ocupa el muro trasero de la pinacoteca –“de la vergüenza”, afirmó el director José Miguel García Cortés- y que supone el pistoletazo de salida creativo a la puesta en marcha del jardín de las esculturas. "Esta pintura mural es el primer paso de una renovación absoluta del antiguo solar del IVAM”. Aunque esta última declaración corresponde a Cortés, no pasa así con la primera. Celoso de su privacidad y siempre esquivo cuando se trata de explicar su obra, el artista urbano valenciano ha hecho una excepción para el museo, aunque, eso sí, el misterio continúa.
El creador ha redactado un texto específico para explicar en primera persona el proceso de creación e inspiración tras un mural con una dimensión de unos 2.000 metros cuadrados y en los que se ha invertido seis meses de trabajo, durante los que el autor se ha entrevistado con diferentes agentes de la zona para intentar “encontrar pistas y direcciones con las que poder desmaterializar la pared en sus diferentes capas”. El resultado es un mural que se compone de la historia del barrio y de la relación con el solar, en el que no se obvia el movimiento vecinal que derivó de su desmantelamiento. “Escif habla del pasado del barrio del Carmen, de los antiguos habitantes que fueron expulsados y del movimiento de protesta que desencadenó”, recalcó Cortés, quien confirmó que, a pesar de tratarse de graffiti, la obra no tiene fecha de caducidad y el IVAM se compromete a mantenerla. Eso sí, siendo conscientes de que el muro puede ir completándose con otros.
El mural es una narración sobre el pasado, presente y futuro del museo, con guiños al antiguo Bar Pastoret o al horno que existía junto al solar. También puede hacerse una lectura del presente en el mural de Escif a través de algunas de las frases que se leen en la pared y que pintaron otros grafiteros, como la que dice "si estás leyendo esto es demasiado tarde". Las pintadas con las que los alumnos del instituto de enfrente llenan sus pasillos y cuartos de baño, incorporadas por Escif en el mural ("Chema hueles" o "Martina") simbolizarían el futuro del barrio."Las paredes están pensadas para manejar la vida en la ciudades; no para ser manejadas por la vida en las ciudades. La pintura abusa de la paredes, humillándolas, ridiculizándolas y transgrediendo su función oficial. En lo que podemos llamar un efecto espejo, la pintura permite invertir la soberbia con la que el hormigón se impone antes las masas [...] Una pared pintada es una pared borrada", expresa Escif.
Esta es la versión del artista valenciano aunque, por otra parte, el propio autor les invita a olvidar todo lo que han leído en el texto: “no existe un discurso oficial, ni tiene sentido reconocer la interpretación personal del pintor. Aún siendo posible reconocer marcos de aproximación, la pintura contendrá tantas lecturas como lectores se acerquen a ella. De la misma forma, el paso del tiempo y, como consecuencia, la modificación del contexto; permitirán que los parámetros de lectura se modifiquen constantemente. La pintura, como el agua de un río, como las células de nuestro cuerpo, también es impermanente”.
El mural ejecutado por Escif supone para el museo la apertura simbólica del esperado Pati Obert, un jardín de las esculturas que, tras varios retrasos, debería llegar este año. Con las obras previstas pero no contratadas todavía, el propio Cortés admite que “no va tan rápido” como quisieran desde la pinacoteca. “Va avanzando muy lentamente”. Fue en julio que las tres partes implicadas –Ayuntamiento de València, Conselleria de Cultura e IVAM- firmaron el convenio por el que se confirma la aceptación de todas las partes del proyecto para el solar trasero de la pinacoteca, que acogerá escultura de Andreu Alfaro o Miquel Navarro. A la espera de que se ejecute la obra, el director del museo prometió hacer más accesible el espacio, que acogerá diferentes actos en las próximas semanas, entre los que se incluyen visitas guiadas, para conocer la obra de Escif.