VALÈNCIA (P. P./EP). La empresa Inversiones Gran Valencia 2005 S.L., promotora del complejo hotelero y residencia de 575 habitaciones en el barrio de La Saïdia de València, en la calle Guatla, ha reaccionado ante la decisión del Ayuntamiento de València de suspender la concesión de licencias en este enclave para paralizar el proyecto presentado hace cuatro años por la compañía. Así, ha criticado duramente la posición del consistorio y especialmente del gobierno municipal, el concejal de Urbanismo, Juan Giner, y la alcaldesa, María José Catalá, y ha cifrado en 33 millones de euros la compensación por la paralización de la iniciativa.
La empresa ha asegurado en un comunicado, remitido este mismo miércoles, que no quede "ni la más mínima duda" que defenderá "cada euro y cada derecho en todas las instancias judiciales ante el despojo unilateral y arbitrario" al que, a su parecer, está siendo "condenada en contra de la ciudad de València, sus ciudadanos y en favor de unos grupos vecinales de presión que solo cuentan con la razón de tener un puñado de votos, a sabiendas de que el votante español y valenciano, se mueve mas a la hora de votar por ideologías que por la gestión política".
Así, la compañía ha cargado duramente contra el edil de Urbanismo por "faltar a la verdad" y dejar "de informar a la ciudadanía de Valencia tanto de las virtudes del proyecto como del coste que supondrá para el Ayuntamiento no hacerlo". "Parece ser que tras la ruptura de lazos con Vox, el Partido Popular se arrima al seno de Compromís en ese ideal de convertir Valencia en una ciudad de barrios, aunque sea con el coste económico de mas de 33 millones de euros para los ciudadanos de Valencia que supondrá la suspensión del proyecto", asegura el comunicado.
La firma defiende en el comunicado el proyecto de la residencia de estudiantes para la "modernización de la ciudad" y su integración en el circuito universitario de Europa y del Erasmus. "Un proyecto dinamizador del barrio y su integración en la globalidad de una ciudad del siglo XXI abierta a la cultura y a la sostenibilidad inmobiliaria, al liberar viviendas antes destinadas a estudiantes, a familias, jóvenes y a todos aquellos que precisan un hogar tan escaso como ocurre en la actualidad".
Además, ha recurdado que "no es un fondo de inversión sino una compañía valenciana y familiar que esta abierta al diálogo, a propuestas e iniciativas que el Ayuntamiento de València quiera ofrecer", y que ya advirtió en su momento que llevaría "ante las últimas instancias judiciales nacionales e internacionales" la suspensión de licencias. Ahora critica que mientras la alcaldesa, María José Catalá, "se reúne con asociaciones vecinales del distrito de Saidia, Juan Giner manifiesta ante los medios de comunicación que no ha podido obtener contestación alguna de la propiedad del proyecto a pesar de haberlo intentado y tras varias reuniones", un extremo que niega la entidad.
"Lo cierto es que pensábamos que la costumbre de faltar a la verdad era propio del ADN de la oposición municipal, sin embargo nos causa una lamentable sorpresa que el Sr. Giner se sume a esa tónica de falsear la realidad con una intención exclusiva de alegrar los oídos" a las asociaciones vecinales, explica el documento: "El Sr. Giner no podría identificar [...] con qué persona, representante o portavoz de la propiedad se ha reunido. No podría ni puede porque es falso".