Foto: EDUARDO MANZANAVALÈNCIA. (VP/EFE) La dirección de Ford ha propuesto reducir en una semana las vacaciones anuales de los trabajadores de la planta de Almussafes (Valencia) y ha vuelto a insistir en la rebaja salarial, además de plantear la posibilidad de establecer medidas, como una bolsa de horas o un corredor de vacaciones, que ya existen en otros convenios del sector. No obstante, los sindicatos rechazan estas propuestas al considerar que son "inasumibles" y han pedido a la empresa que concrete propuestas que exploren flexibilidad laboral en la planta.
Por tanto, las posiciones siguen alejadas y el acuerdo para asegurar el futuro de la factoría aún está lejos de cerrarse. Este miércoles, dirección y Comité de Empresa volvían a reunirse para acordar un plan de ajustes que consiga que la planta valenciana se adjudique los nuevos modelos eléctricos que Ford lanzará al mercado. Una decisión que asegurará el futuro de la factoría valenciana que compite con la planta alemana de Saarlouis por hacerse con este encargo. Solo una de ellas recibirá la futura carga de trabajo y tendrá garantizada su viabilidad porque la multinacional ya ha avanzado que los nuevos coches no serán suficiente para sostener ambas fábricas.
El plazo para que ambas plantas eleven sus propuesta a Ford Europa expira el 27 de enero, lo que ha generado que los encuentros en Almussafes se sucedan con el fin de evitar un oscuro futuro. Ya en verano será cuando se comunique la decisión final y se conozca la elegida para producir los nuevos vehículos de la multinacional del óvalo. Mientras tanto, la prioridad en la factoría valenciana es cerrar un acuerdo para evitar cualquier escenario que agite aún más a una plantilla en continúa incertidumbre.
Así, en la reunión de este miércoles, UGT, sindicato mayoritario, mostraba su disposición de avanzar en medidas de flexibilidad, pero sin que las mismas sean a costa de los derechos de los trabajadores. Y, por el momento, consideran que los planteamientos de la empresa "no son asumibles". "Hemos dicho que podemos hablar de flexibilidad, pero recortar una semana de vacaciones no. Estamos aún muy alejados. Nos están pidiendo más de lo que podemos asumir", asegura el secretario general de UGT-Ford, José Luis Parra.
Desde UGT, señala, están dispuestos a abordar algunas medidas pero admite que ahora mismo están "muy alejados en las propuestas de la empresa" porque consideran que se sigue pidiendo demasiados esfuerzos a la plantilla. "Perseguimos un acuerdo donde todos ganemos, no somos novatos en este campo", ha asegurado Parra tras recordar la flexibilidad que ha demostrado la plantilla a lo largo de los años.
Sobre la reducción salarial que pide Ford, para sorpresa de los representantes sindicales tras la última reunión en la que la dirección se comprometió a pagar el IPC de 2021 pactado en el convenio colectivo, cercano al 7 %, y a no realizar recortes salariales en 2022, la dirección ha planteado la necesidad de anteponer el futuro de los próximos años. En este sentido, ha propuesto de nuevo la rebaja salarial a cambio de tener 10, 12 ó 15 años de trabajo estable con una posible inversión de cientos de millones de euros, según UGT.
En cuanto a las vacaciones, se ha concretado la petición de reducir en una semana las vacaciones anuales, y los sindicatos han interpretado que se hacía referencia a la semana de Pascua. Actualmente, los trabajadores disfrutan de tres semanas de vacaciones de verano y otra en Semana Santa. También se han expuesto otras medidas como una bolsa de horas o el corredor de vacaciones, para combinar los descansos con la demanda en los periodos vacacionales.
El representante de UGT ha asegurado que se va avanzando poco a poco y que un plazo máximo de 24 ó 48 horas volverán a negociar. "No cerrar un acuerdo antes del 27 de enero sería catastrófico", advierte.
Por otra parte, este miércoles la dirección ha comunicado que actualmente está garantizado el suministro de componentes para el lunes 24 de enero, por lo que no habrá parada de producción.
Ese día se había fijado en el calendario del último ERTE, que afecta a más de 4.700 empleados de las plantas de vehículos durante quince días laborables del primer trimestre del año.
