VALÈNCIA. Compromís y Sumar cerraron este viernes el acuerdo para acudir a las urnas el próximo 23 de julio conjuntamente.La coalición se llamará Compromís-Sumar: Sumem per Guanyar, aunque en la papeleta tan solo aparecerá la primera parte de la marca para no ser tan extensa, y los valencianistas tendrán la potestad de designar los dos primeros puestos por Valencia al Congreso, así como el segundo y cuarto por Alicante, el segundo por Castellón y consensuar con sus socios el primero por esta circunscripción.
A cambio de este reparto de puestos en las listas y de incorporar la marca de Compromís, el logo que figurará en la papeleta será nada más y nada menos que la cara de Yolanda Díaz para que la gente pueda identificar sin problemas a Sumar cuando acuda al colegio electoral y se enfrente a los montones de papeletas.
Ahora bien, con todos estos flecos cerrados, ahora la coalición valencianista se enfrenta a un segundo reto: elegir quién liderará el proyecto por Valencia, así como el reparto entre las tres patas de Compromís de los puestos en la lista.
En los últimos días se había postulado como número 1 al Congreso por Valencia el concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset. Desde su entorno más cercano defendían su figura y el grado de conocimiento que este tenía entre el electorado "más allá de la ciudad" por su vinculación con el mundo de las Fallas.
La intención de parte de la formación que aupaba su posible candidatura era "reparar" o compensar de una manera la situación que había vivido el concejal durante cuatro años en los que se le apartó de primera línea política a raíz de su imputación por el accidente de Viveros por el que, en noviembre del año pasado, la Fiscalía le absolvió.
Sin embargo, tras conocerse el pacto entre Compromís y Sumar, el edil anunció su renuncia a optar a liderar la candidatura al Congreso por Valencia. Una decisión que fuentes de su entorno, no obstante, aseguran que había tomado desde hacía días y tras la que se encontraría la preferencia del concejal de mantenerse en la capital del Turia y optar además a un puesto en la Diputación de Valencia durante los próximos cuatro años.
Un cargo, tal vez de portavoz de Compromís en la corporación provincial, que le serviría, además, para ganar protagonismo de cara al futuro cartel electoral municipal de 2027. No en vano, es el favorito en la carrera por la sucesión de Joan Ribó en la capital. Un melón que tendrá que abrirse tarde o temprano en Compromís València.
El alcalde en funciones ya aseguró días atrás su intención de mantenerse como portavoz en la oposición durante los próximos cuatro años. Y aunque algunos dentro del partido cuestionan que vaya a agotar la legislatura y creen que dirá adiós una vez pasen las elecciones generales del próximo 23 de julio, lo que es cierto es que el puesto de portavoz lo asumiría inmediatamente la edil Papi Robles, número dos en la lista, y no Fuset, número 3.
Un puesto en la Diputación de Valencia, donde la izquierda además seguirá gobernando, podría dotar a Fuset de la visibilidad necesaria de cara a una hipotética candidatura para la cita en las urnas municipales de 2027.
También los últimos días se había especulado con la posibilidad de que fuera el exconseller de Educación, Vicent Marzà, quien asumiera el reto de defender la agenda valenciana en Madrid como hasta ahora había hecho Joan Baldoví. Fuentes de Més destacaban de él el trabajo realizado por el diputado autonómico durante dos legislaturas, primero desde la Conselleria y después desde Les Corts.
Él mismo no había verbalizado si entraba en sus planes, o no, liderar el proyecto por Valencia. Sin embargo, este viernes aprovechó para aclarar a la militancia que no lo hará. Su decisión pasa por quedarse en el Parlamento valenciano para ejercer de oposición a PP y Vox. "Tengo ilusión y ganas de seguir haciendo equipo desde Les Corts y con todos vosotros por defender lo que hemos hecho como gobierno, así como ser la voz de las personas y movimientos de nuestro País que luchan por los mismos valores que nosotros", explicaba en un comunicado.
"Tendremos un grupo parlamentario fuerte y lideraremos la oposición. Debemos ganar la confianza de más gente, cohesionarnos y reforzarnos", añadía Marzà. "Tenemos trabajo, y lo tenemos aquí en casa", concluía el mensaje.