VALÈNCIA. Más vale tarde que nunca. La Conselleria de Sanidad ha liquidado 13 años después de iniciar la concesión del departamento sanitario de Manises los dos primeros ejercicios de la misma. Así lo apuntan fuentes del departamento hospitalario, que señalan que el anterior equipo de Gobierno finalmente acató una sentencia de enero de 2018 en la que se estima la demanda interpuesta por Especializada de Manises SL - gestionada por Bupa Sanitas- respecto a la paralización en los cálculos.
Este parámetro, que ajusta el precio de la gestión de los centros de concesión a favor o en contra de la administración según los servicios prestados, llevaba sin liquidarse desde 2009 por diferencias en la contabilización del gasto cruzado de la concesionaria y la conselleria en atención a pacientes desplazados de una y otra áreas de salud. Un conflicto que se deriva del Gobierno del PP liderado por Alberto Fabra y que no se ha resuelto a pesar de que tras Manuel Llombart, tres consellers más han pasado por la cartera sanitaria con el Govern del Botànic - Carmen Montón, Ana Barceló y Miguel Mínguez-.
En el caso de la liquidación de estos dos años iniciales, los cálculos se han resuelto con un pago de 22,2 millones por parte de la concesionaria a la administración, quien ya comunicó durante la pasada legislatura que la gestión de concesión público-privada llegará a su fin en 2024. Desde hace años, Especializada de Manises recoge su inquietud por la "inseguridad jurídica" que genera el no tener claros unos números que deberían haberse aprobado año a año, dado las cifras millonarias que pueden arrojar.
El no tener las cifras claras -cuestión se mantiene en los otros 11 años de la actividad de la gestora- "impide a las partes conocer la realidad del proyecto", según recoge la sociedad en el informe de gestión que acompaña a sus cuentas de 2022 y que, en dicho año, seguía sin aclarar cuenta alguna. Con fecha 8 de marzo de 2023, se presentaba un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Valencia contra la Conselleria de Sanidad, por la desestimación por silencio del escrito presentado por la sociedad con fecha 28 de junio de 2022.
En ésta se requería nuevamente la elevación a definitivas de las liquidaciones 2009 y 2010 y la práctica de las correspondientes a los ejercicios 2011 a 2021. Ahora, tendrán que volver a reunirse las comisiones mixtas para aprobar el cálculo de los años restantes, en un departamento de Sanidad ahora liderado por Marciano Gómez en el nuevo Gobierno de Carlos Mazón.
En este marco de unas cuentas que no son definitivas por la carencia de las liquidaciones, la compañía incrementó su cifra de negocio hasta los 271 millones de euros, un 59,5% más que en 2021. Mientras, el beneficio ascendía a 48,9 millones frente a los 18,3 millones de euros del año anterior. No obstante, la compañía no repartió dividendos debido a las circunstancias con la administración y las destinó a reservas voluntarias.
Según recoge la memoria que acompaña a las cuentas, en 2021 se recuperó la actividad dada la relajación epidemiológica gracias a la vacuna contra la covid-19, que permitió continuar con la actividad asistencial. En este sentido, la actividad quirúrgica presenta un incremento del 14% respecto a 2021, mientras que la actividad en consultas externas se incrementa un 11%, los TACs realizados un 8%, las tomografías cerca de un 8% acercándose a los niveles de actividad previos.
Entre los datos de accesibilidad más destacados, señalan la demora media para ser intervenido quirúrgicamente en el Hospital de Manises fue de 45 días, frente a los 88 días de la media de los hospitales valencianos a diciembre de 2022, una espera de un 49% inferior respecto del conjunto de hospitales públicos de la Comunitat, según apunta. Por otro lado, en 2022 han invertido más de 6,4 millones de euros dedicado a renovación de equipos médicos diversos y mejora de infraestructuras.