VALÈNCIA. La Conselleria de Hacienda ha decidido anular el concurso para la rehabilitación del Palacio de Calatayud, ubicado en la calle Micalet, 5 de València, al comprobar que el precio de la licitación "estaba fuera de mercado". La convocatoria se publicó hace unas semanas con un presupuesto de 7,5 millones de euros. El objetivo era recuperar este espacio de más de 3.800 metros cuadrados para uso administrativo en pleno centro histórico de la ciudad.
No obstante, como consecuencia de la coyuntura inflacionista y el encarecimiento que arrastran desde hace meses las materias primas, el departamento que dirige Vicent Soler ha decidido anular la convocatoria dado que todavía no se había adjudicado y al considerar que el precio "estaba fuera de mercado", lo que podría haber provocado que la licitación quedara desierta.
Por tanto, lo que se pretende con este desistimiento es "adaptar el presupuesto a la realidad del mercado, lo que conlleva necesariamente una corrección al alza del presupuesto de licitación para facilitar la concurrencia de licitadores y la ejecución de la obra con suficiente garantía para que se puedan absorber los probables incrementos de precios", según justifica Hacienda.
Eso sí, la Conselleria no renuncia a una próxima convocatoria pública, pero quiere que sea "plenamente garantista de los derechos de los licitadores y de los principios de la contratación pública", según consta en su justificación publicada en la Plataforma de Contrataciones del Estado. La licitación se publicó el pasado 1 de abril y la presentación de ofertas vencía el próximo día 29.
El Palacio de Calatayud, propiedad de la Generalitat, tiene su acceso principal en la calle Micalet y ocupa gran parte de la manzana formada por esta calle y las adyacentes: calle Santo Cáliz y calle Horno de los Apóstoles. Su situación, cerca de la sede de Presidencia, de la Vicepresidencia primera, de Les Corts y de la Conselleria de Hacienda, lo convierten en un espacio óptimo para su uso administrativo.
El conjunto del palacete, obra del arquitecto Juan Luis Calvo Catarineu, nunca se ha restaurado de forma conjunta, sino que se han ido sucediendo una suma de intervenciones puntuales de mayor o menor envergadura. Sin embargo, el paso del tiempo y el deterioro de las instalaciones ha provocado grandes carencias de funcionamiento en el edifico, sobre todo en materia de seguridad y accesibilidad.
Por ello, con la rehabilitación se busca poner en valor los restos arqueológicos que se han encontrado durante algunas de las adecuaciones, así como rescatar las estancias principales respetando su ornamentación original. De esta forma, el objetivo es aunar funcionalidad y armonía entre los usos del patrimonio valenciano y su recuperación, fomento y valorización.