VALÈNCIA. Ignacio de la Torre, socio y economista jefe de Arcano Partners, estuvo en València la semana pasada presentando un informe donde ha participado en su elaboración titulado 'España, ¿una nación emprendedora?', cuya una de sus principales conclusiones es que unos cuatro millones de españoles corren peligro de perder su trabajo de un total de diecinueve. Casi nada.
El que también es director académico de los Masters in Finance del del Instituto de Empresas (IE), profesor asociado de Finanzas del IE y vicepresidente y fundador de Financieros sin Fronteras charló animadamente durante una hora con este diario. Lo hizo respondiendo de cuantas cuestiones se le pusieron sobre la mesa. A continuación la charla mantenida:
-En primer lugar, ¿qué le trae por València?
-Hemos venido a presentar el informe 'España, ¿nación emprendedora?' donde explicamos el grave problema que tiene este país con cuatro millones de trabajadores en peligro de perder su empleo entre un total de diecinueve millones y eso es un importante desafío. Hay que hacer algo de forma urgente y cambiar el modelo productivo para reducir riesgo de desempleo tecnológico; esto es algo que no es de izquierdas ni de derechas sino una cuestión de Estado. En el informe explicamos cómo generar ecosistemas de emprendimiento e innovación de forma exitosa Y para ello España tiene que afrontar el reto que supone la digitalización.
-Pero, ¿es el español un emprendedor?
-El español tiene una aptitud emprendedora pero hay poco dinero para emprender en este país. Hace falta financiación y también generar patentes, eso es fundamental. Falta diálogo entre universidad y empresa.
-¿Cuáles son los factores que determinan el éxito de un ecosistema de emprendimiento, conocimiento, innovación y financiación?
-Son seis: financiación, generación de conocimiento en forma de patentes -en occidente hay 400 por millón de habitantes y en España apenas 80-, capital humano -gente que no tenga miedo al fracaso-, tener una carga regulatoria que no sea muy pesada y burocrática, acceso a los mercados y especializarse bien en algo en concreto con potencial de crecimiento.
-Todos esos factores unidos al boom emprendedor que hay en València, ¿podrían convertirla en un nuevo Silicon Valley?
-En España existen cuatro polos de emprendimiento relevantes como son Madrid, Barcelona, Bilbao y València. Un tercio de todas las start-ups están en Madrid, otro en Barcelona y el resto se reparten principalmente sobre todo en Bilbao y València. Y en cuanto a financiación el 50% se concentra en Barcelona, el 25% en Madrid y el 25% restante entre Bilbao y València. Hacen falta niveles de financiación más elevados y generar invenciones en las universidades. Silicon Valley pasó por una colaboración muy profunda entre el ejército americano donde se aprovecharon las investigaciones militares. Sería hacer un mix en España entre universidad, empresas y fuerzas armadas como en Stanford.
-Teniendo en cuenta el elevado peso del PIB de la CV en exportaciones y turismo, ¿considera recomponerlo para no tener que depender de factores exógenos?
-Al final si eres muy bueno en algo como en turismo no tienes que reducirlo. Pero dicho esto es muy importante tener sectores de emprendimiento y tecnológicos porque te pueden minimizar el ciclo de la caída inmobiliaria por poner un ejemplo; además de generar grandes oportunidades entre la gente joven. La gran tragedia de este país es la gente joven porque tenemos un sistema laboral dual muy dañino y un auténtico 'marrón' con la deuda pública. No es razonable que en España una persona joven esté ocho años con contratos laborales, cuando la media en Europa tarda dos años en conseguir un contrato fijo. No es justo sacrificar una generación entera; mientras un ecosistema emprendedor va a generar oportunidades entre jóvenes. Contratos fijos y razonablemente retribuidos no es una cuestión de ideología y sí de Estado.
-¿Cómo podría situarse España entre los líderes en innovación y financiación tecnológica?
-Estamos a la mitad en financiación por renta per cápita que en Europa y apenas una décima parte si nos comparamos con Estados Unidos. Lo que hay que hacer es canalizar parte del ahorro en seguros y fondos e invertir en venture capital para financiar los proyectos tecnológicos y mejorar el ratio de patentes. Insisto: hace falta aumentar el diálogo entre la universidad y la empresa privada para elevar la inversión en I+D porque invertimos el 0,8% menos en el sector privado que las empresas europeas. Además, en España dos tercios de los investigadores pertenecen al ámbito público y el resto al privado, mientras que en occidente es justo al revés.
-Cambiando de tema, el último trimestre del pasado año fue nefasto en los mercados financieros, todo lo contrario que este. ¿Qué ha cambiado si continúan sin resolverse factores como la ‘guerra comercial’ y el Brexit?
-En 2018 veníamos de crecimientos razonables e indicadores de actividad muy altos. Durante el verano de 2018 empeoró rápidamente la confianza, el comercio mundial entró en terreno negativo y Europa pasó de crecer del 2,5% al 0,5%. A ello se sumó que la economía china empezó a crecer a bastante menor ritmo del que venía haciéndolo, América Latina también y Estados Unidos se mantuvo con su 2%. Todo eso tradujo en una gran crisis en los mercados financieros, que vivieron un último trimestre del pasado año para olvidar.
-Y este pasado verano parecía que la situación iba por el mismo camino...
-Así es porque la gente se asustó pero parte de los datos se dieron de una forma sesgada. Los indicadores adelantados de actividad estaban mejorando y el índice de gestores de fondos de Bank of America presentó la mayor subida desde 1994 en un solo mes. Los PMIs o índices de gestores de compras de manufacturas han entrado en positivo y el de servicios ha dejado de caer, por lo que no descuentan recesión económica. Además de todo ello Alemania está mejorando mucho el sentimiento; mientras vamos encaminados a un mundo de crecimiento que depende de dos factores: cuántas horas trabajamos y cuál es la productividad de las mismas.
-Volviendo a España, ¿qué futuro les espera a nuestras pensiones?
-La esperanza de vida aumenta dos meses cada año. ¿Va a quebrar el sistema? No. Pero va a tocar a repartir menos porque es matemática pura a medida que aumenta la esperanza de vida. Yo a la gente joven le digo que cada hora que trabajas pagas entre tres y cuatro euros a la Seguridad Social (sonríe).
-¿Y cuál es su receta para poder cobrar una pensión digna?
-Hay que ajustar la pensión a la longevidad, además es relevante entender que percibimos el 70% de lo que hemos contribuido y la media europea es del 50%. Recibimos más de lo que hemos pagado y eso no es sostenible. ¿Solución? Alargando la edad de jubilación porque no nos queda otra y poco a poco ir mejorando el ratio de reposición. Además tenemos el problema que España es un país con una productividad un 20% inferior a la de Alemania porque nuestras empresas son muy pequeñas. Hay que aumentar la productividad y eso generará un PIB más grande; si la empresa pequeña crece se reduce la economía sumergida tendremos más recaudación.
-Volviendo a los mercados financieros, ¿cuál es su visión sobre la bolsa española para el próximo año?
-La bolsa española recibe muchos flujos de caja de empresas con alta exposición a América Latina y el horizonte allí es incierto. Otro factor es que tenemos un índice (Ibex 35) muy concentrado en el sector bancario, que depende del Banco Central Europeo (BCE) y su política monetaria no va a cambiar. Los retornos que esperamos para 2020 de la bolsa española no son muy allá.
-¿Ve un Gobierno estable en España de la mano de PSOE y Podemos?
-No lo veo. Va a ser un Gobierno débil y con poca capacidad para legislar. Cierto es que Podemos es mucho más moderado que hace cuatro años pero no veo un Gobierno estable.
-¿Queda mucho tiempo para que los tipos de interés en la Eurozona comiencen a subir?
-Sí y basta con echar un vistazo a los swaps de inflación del Euribor que están en negativos para los próximos siete años. Es lo que dice el mercado de derivados, por lo que los bajos tipos de interés permanecerán mucho tiempo.
-Y hablando de subidas, ¿dónde se va a detener la de las bolsas americanas?
-Al final Wall Street se ha beneficiado de una medida que poca gente esperaba: la Reserva Federal (FED) se asustó en septiembre pasado de que habían reducido demasiado el balance. Hubo un problema de transmisión de política monetaria y lo que han hecho es inyectar al mes 60.000 millones de dólares. Y eso es más dinero en el sistema.
-Echemos ahora un vistazo al venture capital al que se ha referido durante la entrevista, ¿cómo ve la salud de este instrumento de financiación en España?
-Partíamos de bases muy bajas pero hemos mejorado y desde 2012 hemos triplicado la inversión. Pero dicho esto seguimos en niveles muy bajos de apenas un 0,05% frente al 0,10% de la media europea y de Israel. Vuelvo a decir que hay que conseguir que los fondos de inversión y pensiones inviertan en venture capital para lograr un cambio en la dinámica de las ayudas del Estado en lo que a I+D se refiere. En Israel lo hacen a fondo perdido, mientras en España más de la mitad de las ayudas en I+D no se utilizan.
-¿Y qué propone al respecto?
-La puesta en marcha de una figura de innovación con criterios de políticas de Estado y con un objetivo a ocho años. Hace falta mucha especialización.
-Para terminar, ¿cuál es el valor diferencial de Arcano?
-Básicamente el ser un banco inversión independiente donde los socios son los dueños con capital 100% español. No tenemos conflictos de interés y nuestra relación con los clientes es a largo plazo. La gente busca independencia y nosotros la ofrecemos con gente con experiencia que procede de bancos internacionales.
-¿Y el perfil tipo del cliente?
-Tenemos dos tipos: por un lado, el de banca de inversiones donde asesoramos los procesos de fusiones/adquisiciones desde los 60 hasta los 500 millones de euros a compañías familiares, industriales o participadas por fondos de private equity. Y, por otro, tenemos el negocio de gestión de activos con más de 3.000 millones de euros a través de crédito, bonos high yield, fondos de fondos de private equity, estrategias de venture capital, real estate... Acabamos de lanzar un fondo de fondos de inversión socialmente responsable de impacto enfocado a las energías renovables. La mitad de nuestro dinero pertenece a clientes españoles.