VALÈNCIA. La consellera de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio, Salomé Pradas, ha anunciado que las obras de la nueva Ronda Oeste de Carlet empezarán en seis meses. El proyecto cuenta con un presupuesto de 7,4 millones de euros y un plazo de ejecución previsto de dos años y medio.
Para Pradas, esta infraestructura "será el gran eje vertebrador del Carlet del futuro y ejemplo de los proyectos urbanos que impulsará en Consell para mejorar la calidad de vida en nuestros municipios".
Así se ha expresado la consellera tras su reunión con la alcaldesa de Carlet, Laura Sáez, ante la que se ha comprometido a agilizar la futura obra que desviará gran parte de los 8.800 vehículos diarios que soporta el tramo de la CV-50 que actualmente cruza la localidad.
Durante la reunión, la responsable de Infraestructuras ha explicado que la Generalitat plantea la construcción de una nueva ronda viaria exterior a la población, para favorecer la descongestión del tráfico y calidad ambiental. "La Generalitat se compromete a agilizar esta actuación urbana tan necesaria para Carlet porque resolverá un problema histórico de funcionalidad en el municipio y, además, potenciará un eje de encuentro, respetuoso con el medio ambiente y con espacios públicos recreativos que fomenten los desplazamientos a pie o en bicicleta".
Pradas ha señalado que "el desarrollo de infraestructuras y sostenibilidad van a ir de la mano en el diseño de nuestras ciudades. Por ello, este proyecto es un ejemplo de la importancia que para el Consell tiene priorizar rondas de circunvalación y el uso de vehículos alternativos. Además, contribuirá de una manera sustancial a reducir el volumen de tráfico en el núcleo urbano".
La Ronda Oeste tendrá unos 1.680 metros de longitud que se extenderá en el borde exterior del municipio para crear un eje paralelo a la actual travesía y situado a unos 500 metros. Además del tráfico rodado, contará con viales para bicicletas y un paseo para viandantes. A fin de controlar la velocidad, dispondrá de tres glorietas en los cruces principales.
El vial tendrá 19,90 metros de anchura compuesto por una calzada con dos sentidos de circulación separada por una mediana pisable de un metro y arcenes de cincuenta centímetros, salvo en el tramo central (entre el Camí dels Depòsits y el Camí del Cementeri) en el que se dispondrán dos carriles por sentido.
La infraestructura se completará con una banda ajardinada de 2,4 metros de anchura por la banda exterior y un paseo ajardinado de 9,5 metros que contará con un carril bici y un andén peatonal. En suma, la superficie para viandantes y ciclistas será de unos 15.000 metros cuadrados donde está previsto que se planten 853 árboles y cerca de 10.000 arbustos.
Está previsto que las obras duren un total de 30 meses. El proyecto incluye también el acondicionamiento de la estación de tren de Benimodo para habilitar una zona de recogida de usuarios, aparcamiento para vehículos, parada de autobuses y la construcción de carriles bici para completar los itinerarios peatonales y ciclistas.