VALÈNCIA. Compromís ha perdido oficialmente la alcaldía de Massalfassar. Ayer prosperó la moción de censura que Ciudadanos, el Partido Popular y Demòcrates Valencians presentaron contra el equipo de gobierno valencianista liderado por Joan Morant. Un movimiento que ya estaba totalmente asegurado con los votos de estos tres partidos pero que, en el último momento, contó con un cuarto aliado inesperado: el único edil socialista, Ismael Gimeno.
El concejal abandonaba así cualquier rastro de lealtad al Botànic y dejaba totalmente solo a Compromís, a pesar de que los estatutos socialistas contemplan los pactos progresistas como la prioridad en la provincia de Valencia. Un voto que materialmente no cambiaba el devenir de los acontecimientos pero que, aun así, no ha sentado demasiado bien a la ejecutiva comarcal. "Se ha procedido a la apertura de un expediente disciplinario por falta muy grave", declaró ayer mismo Juan Carlos Fulgencio, líder del PSPV en L’Horta Nord. Un expediente que, aunque todavía está pendiente de valoración, acabará casi con total seguridad en la expulsión de Gimeno del partido.
Sin embargo, este no es el primer encontronazo entre el concejal y su propia formación. Las desavenencias venían ya de lejos, cuando la rama local pasó a estar controlada por una gestora después de que el edil de Massalfassar perdiera la confianza de los suyos. Ahora, la brecha se hace todavía más grande con el apoyo a una moción que llevará a PP y Ciudadanos a alternarse la alcaldía de la localidad. "La junta local le pidió que no lo hiciera, y aun así lo ha hecho", reiteraba Fulgencio. "No avisó a nadie de que votaría a favor. El partido tomó una decisión y así se le comunicó. Si no la ha cumplido, deberá asumir responsabilidades", concluía.
Por su parte, Ismael Gimeno justificó su decisión basándose en la "responsabilidad y lealtad a Massalfassar". "Yo no he sido quien ha presentado la moción, pero llevamos cuatro años con un presupuesto prorrogado que es irreal. Compromís está gobernando con cuatro de once concejales y no ha sido capaz de llegar a acuerdos con la oposición". De este modo, el edil socialista adopta las tesis de Ciudadanos, PP y Demòcrates, quienes también aludieron al presupuesto y a la ingobernabilidad de la minoría para presentar la moción de censura.
"En 2019, los socialistas apoyamos la investidura de Compromís con la esperanza de que en esta nueva legislatura fueran capaces de retomar contactos, pero ya se ha visto que su línea no es el diálogo", concluía. Por todo ello, Gimeno se ha visto obligado a votar por un gobierno de coalición que asegurará una mayoría plenaria estable y capaz de aprobar medidas. Aunque eso signifique virar hacia la derecha.
Sobre su posible entrada en el equipo de gobierno, prefiere "no hablar de hipótesis". "No he votado pensando en eso, y tampoco he tenido conversaciones con los promotores de la moción", asegura. Asimismo, añade: "La abstención habría sido lo más sencillo, pero llega un momento en el que tienes que tomar decisiones por el bien del municipio. No se viene a la política a estar cómodo".
Tras la destitución de Compromís, el Partido Popular y Ciudadanos se alternarán la alcaldía del municipio. El primero gobernará hasta agosto de 2021 y el segundo hasta agotar la legislatura. Álvaro Montañés será el alcalde popular y, mientras esté en el cargo, ostentará Gestión Interna, Personal, Policía, Seguridad Ciudadana y Cultura. Por su parte, el futuro alcalde naranja, Higinio Yuste, se quedará con Fiestas, Tradiciones Populares, Comercio y Gente Mayor. Cuando llegue el momento, ambos se intercambiarán estos cargos.
La otra gran área de gobierno que le quedará al PP será Medio Ambiente, Playas, Agricultura, Parques y Jardines. Por su parte, Ciudadanos tendrá dos: Hacienda y Contratación por un lado, y Deportes, Sanidad, Mujer y Educación por el otro.
Finalmente, el edil de Demòcrates Valencians, que es el pivote sobre el que sustenta la mayoría absoluta, tendrá Urbanismo. Cabe recordar que Carles Fontestad fue alcalde de Compromís durante la anterior legislatura. Sin embargo, cambió sus siglas políticas después de una serie de desavenencias sobre quién debía encabezar la lista para el año 2019. Ahora, ha votado contra su excompañero de partido Joan Morant para desalojarlo de la alcaldía.
Este reparto de poderes, según ha explicado Álvaro Montañés a Valencia Plaza, corresponde a las primeras conversaciones informales entre los actores implicados. Por el momento, todavía está pendiente de celebración la reunión en la que se formalizarán los cargos.
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