Ribó junto a varios de los concejales de Compromís en el Ayuntamiento. Foto: ESTRELLA JOVER
VALÈNCIA. Un túnel pasante ferroviario para la ciudad de València es "clave" y "fundamental" para el alcalde de València, Joan Ribó. Una postura que, en último término, supone rechazar de plano cualquier alternativa que no contemple este canal subterráneo de tren que atraviese el Cap i Casal y que elimine el cul de sac ferroviario que es ahora mismo la Estación del Norte.
El primer edil se manifestó en estos términos este martes tras reunirse con la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà, para hablar precisamente del proyecto de dicha infraestructura y del Corredor Mediterráneo coincidiendo con la convocatoria del Consell de l'Horta para el próximo 28 de diciembre.
El Ministerio de Transportes ha sacado recientemente a exposición pública los estudios informativos para el proyecto. Una de las alternativas que rechaza el Gobierno de España, planteada por tres expertos de la Universitat Politécnica de València, elimina la necesidad del túnel pasante de València y de las dos nuevas estaciones de Cercanías en Aragón y la zona universitaria planteadas por el Ministerio, así como de una plataforma nueva para AVE y larga distancia.
Sin embargo, este tipo de proyectos no entran en los planes del alcalde de la ciudad y de la consellera del ramo, a juzgar por sus intervenciones este martes, que consideraron el túnel pasante y las nuevas estaciones de Cercanías una pieza clave para la red arterial ferroviaria de València ciudad y su área metropolitana.
"El anillo [túnel pasante] que hacen todas las propuestas del Estado es clave para tener unas Cercanías adecuadas a la situación de nuestra ciudad", aseveró Ribó, quien añadió que trabajar en "esta salida tunelada hacia el norte y hacer que la estación término de València no sea un cul de sac, como es ahora, es fundamental para poder desarrollar unas Cercanías modernas y que puedan ir desde Gandia a Vinarós". En ese sentido, recordó que las Cercanías de Valencia "no es que estén en un buen momento precisamente, por tanto hacer esto es un elemento clave".
Así pues, el primer edil, como pedía recientemente en este diario el coordinador del Corredor Mediterráneo, Josep Vicent Boira, centró su intervención en mejorar las alternativas que pone sobre la mesa el Ministerio de Transportes, que contemplan la construcción del túnel pasante y una nueva plataforma para AVE y larga distancia hacia Castellón que descongestione ese tramo para el resto de transporte de viajeros -Cercanías- y mercancías.
El Gobierno central ofrece, en sus estudios informativos, hasta siete trazados diferentes para esta infraestructura hasta Catellón -tres si nos ceñimos exclusivamente al túnel pasante subterráneo de València ciudad-, con un coste previsto de entre 1.440 y 2.265 millones de euros, en función de la alternativa. La más cara es, precisamente, la que más protege la huerta, porque en ella, la plataforma de AVE y larga distancia recorre un tramo más largo bajo el suelo, de manera que afecta a menos hectáreas en superficie.
Mollà, presidenta del Consell de l'Horta, explicó que este órgano debe pronunciarse sobre el túnel pasante, un "proyecto importante que tiene que ver con la movilidad" y sobre las "alternativas adecuadas" para su trazado. Así, como el alcalde, defendió que "esta infraestructura estratégica para el conjunto de valencianos y para la movilidad sostenible sea compatible con la protección de la huerta de València". Asimismo, dijo que esa huerta, "normativamente, tiene esa protección", a la vez que ha valorado sus "valores paisajísticos, agrarios y culturales". Por ello, insistió en que estos deben compatibilizarse "con las infraestructuras estratégicas del futuro".
Mollà opinó que "no tienen que descartarse" aquellos "proyectos que son capaces de ser estratégicos" y "siempre compatibles con el entorno natural y agrícola porque valgan algo más de dinero". "No tienen que descartarse, son los acertados", apostilló la consellera, que apuntó que infraestructuras como el Corredor Mediterráneo deben ser "compatibles con la movilidad sostenible, el progreso, el respeto al paisaje, la sostenibilidad y nuestros entornos".
El primer edil aseveró, por su parte, que el Corredor Mediterráneo es "esencial" y "fundamental para València" y se refirió a él como "la Vía Augusta del siglo XXI", por lo que aseguró que es "algo de lo que no se puede prescindir". "No se puede entender la movilidad en la Comunitat Valenciana, el transporte de mercancías y de personas, sin el Corredor Mediterráneo", expuso en ese sentido.
Por todo ello, reiteró que cualquier propuesta al respecto debe respetar la huerta porque "es un elemento fundamental", tras lo que indicó que la "mejor opción" de túnel pasante será "la que más proteja la huerta". "Pedimos que se haga un Corredor Mediterráneo que respete la huerta y que a la vez resuelva la movilidad de la ciudad, que no se puede convertir otra vez en el semáforo de Europa", dijo Ribó, que añadió su intención de trabajar "intentando siempre que la protección de la huerta sea un elemento máximo".
