VALÈNCIA. La compañía Rover Grupo redujo un 19,4% su facturación en el pasado ejercicio de 2020 hasta los 157 millones de euros, según consta en sus cuentas anuales depositadas en el Registro Mercantil.
No obstante, el holding empresarial que preside Alfredo Rodríguez elevó su beneficio al pasar de los 214.000 euros del ejercicio de 2019 a los 6,2 millones conseguidos en el año de la pandemia. Además, el patrimonio neto del grupo ascendió a 33,4 millones de euros, lo que supone el 29,5% sobre sus activos totales.
La compañía cuenta con negocio en diferentes áreas, aunque su principal negocio son las infraestructuras, tanto obra civil como construcción residencial pasando por el sector ferroviario y marítimo a través de diferentes divisiones. De acuerdo con su memoria de gestión, en 2020 su cartera de pedidos ascendía a los 173,1 millones de euros pendientes de ejecutar y repartidos en mercados muy diversificados, aunque el grueso fue para obra civil.
Además, del total de la cartera de pedidos, cerca de 92,3 millones proviene de su alianza con otras firmas para el desarrollo de proyectos a través de Unión Temporal de Empresas (UTE), según apuntan en su informe de gestión.
De cara a próximos ejercicios, Rover Grupo no espera cambios sustanciales en la evolución de la compañía. "Tampoco hay riesgos ni incertidumbres que puedan modificar la previsión de continuidad indicada", aseguran en su informe de gestión.