VALÈNCIA. La Conselleria de Sanidad se ha escudado en las limitaciones de Hacienda para no renovar 4.000 contratos covid a profesionales de la sanidad valenciana ante el limite presupuestario marcado de 130 millones hasta el 31 de diciembre. Así lo han comunicado desde el departamento de Ana Barceló a los sindicatos presentes en la mesa técnica, donde se sentaban este lunes a negociar el recorte de un 43% de los refuerzos a partir de 31 de mayo.
Aunque la consellera de Sanidad, Ana Barceló, señalaba este mismo lunes tras una visita al Hospital Universitari de Sant Joan que no se trata de una reducción de plantilla, sino de una adaptación del personal a la nueva situación; lo cierto es que los representantes de su conselleria en la negociación con los sindicatos aludían a las limitaciones marcadas desde el departamento de Vicent Soler.
Hasta el 31 de mayo, hay vigentes un total de 9.309 contratos por valor de 195 millones de euros. Sin embargo, la propuesta a partir de esa fecha se reducía a 5.337 plazas con un presupuesto de 115 millones. Ahora, dado que aún quedaba algo de margen, desde los sindicatos han conseguido arrancar en la negociación una revisión de la propuesta con un aumento de unos 600 puestos que acerquen el gasto a los 130 millones marcados.
Unas negociaciones que se daban por válidas en la misma tarde de este lunes, cuando Sanidad actualizaba su propuesta y comunicaba que finalmente se mantendrán 6.000 plazas de refuerzo, el 65% de las actuales. Desde el departamento de Barceló señalan que, a día de hoy, este es el presupuesto que hay autorizado y, en el caso de ser necesario, solicitarán más y quedarán a la espera de la aprobación.
"No entendemos la postura de Hacienda, es como si no se hubiera aprendido nada", señala la portavoz de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO-PV, María Ángeles Gómez. Desde el sindicato recuerdan que, aunque a día de hoy la incidencia es baja, eso no quita que se deba de tener previsión ante circunstancias adversas. "No se puede descapitalizar ahora la sanidad pública de personal, primero porque hay déficit estructural y segundo porque podría provocar una huída de profesionales a otros territorios con oferta de trabajo", señala.
Desde el sindicato explican que, en el caso de darse un cambio de tendencia, podría originarse una escasez de personal. Además, señalan la necesidad de personal para abordar la lista de espera que se ha prolongado con el paso de los meses de la pandemia, tanto en especialidades como en quirúrgica, además de los próximos periodos de vacunación.
Mientras, desde CSIF lamentan que a pesar de advertir el pasado viernes de los problemas que la falta de personal acarreará a la ciudadanía y de su oposición frontal, la conselleria mantenga el cese de 4.000 trabajadores. "Creíamos y confiábamos en que Conselleria iba a renovar el 100% de los nombramientos, haciendo con ello una apuesta firme por la asistencia sanitaria pública adecuada y merecida”, señalan desde el sindicato.
Tampoco se mostraban conformes desde Satse. "Entendemos que se debe ampliar la contratación para asegurarnos la vacunación masiva, para garantizar una actividad asistencial plena en el periodo vacacional, conseguir la normalidad asistencial perdida, retomar los programas de crónicos, y, sobre todo, recuperar la actividad quirúrgica programada y la realización de pruebas diagnósticas que se han demorado hasta llegar alcanzar esperas no justificables y estar preparados ante cualquier repunte de la incidencia de casos de Covid en los próximos meses", señalan.
Por su parte, desde el Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana (Cecova) mostraba su oposición frontal a la propuesta de Sanidad para eliminar más de 1.100 contratos de Enfermería y recalca que, durante los meses más duros de la pandemia, "se ha producido una alarmante precariedad laboral" en el colectivo con contratos temporales de poca duración y/o jornadas a tiempo parcial.
Esta misma mañana, Barceló aseguraba que a partir del verano se revisarán las necesidades estructurales de la sanidad pública valenciana para "crear nuevas plazas que sean definitivas y que no estén vinculadas exclusivamente a la situación que hemos vivido". "Ahora ya tenemos que pensar también en el poscovid y adaptar las plantillas a las necesidades asistenciales que a partir de ahora vamos a tener", recalcaba, aunque a día de hoy no hay nada firme sobre la mesa.