VALÈNCIA. Era de prever y ha llegado el momento. Toda vez la Generalitat Valenciana ha eliminado buena parte de las restricciones para hacer frente a la pandemia de coronavirus, el Ayuntamiento de València se dispone a suprimir la ampliación temporal de terrazas que aprobó el año pasado, con la que quería compensar a la hostelería por la delicada situación que atravesaba y por las limitaciones de aforo impuestas por la administración.
El gobierno de la ciudad, y en concreto la concejalía de Espacio Público de València, que dirige la edil Lucía Beamud, está preparando un encuentro para este viernes con la Federación de Hostelería, la Unió Gremial, la Federación de Asociaciones de Vecinos de la ciudad y la Coordinadora de Hostelería de la Comunitat para comunicar que se va a poner fin a la suerte de prebenda que ha permitido a cientos de locales tener ampliadas sus terrazas ocupando espacio público durante 16 meses.
La ampliación de terrazas fue una medida acordada en mayo de 2020 entre el Ayuntamiento, representantes vecinales y las asociaciones hosteleras en un pacto "histórico", a juicio de los dirigentes municipales, pues consiguió hacer converger posturas muchas veces contrapuestas -las vecinales y las de los hosteleros- en un momento clave para la reactivación económica mientras se mantenían restricciones de distancia y aforos para evitar los contagios.
Así pues, la concejalía de Espacio Público diseñó entonces un marco de condiciones para otorgar estos permisos, que además de habilitar la ampliación de la terraza, en algunos casos también contemplaba bajar la misma a zonas de aparcamiento. Desde el principio se acordó, eso sí, que serían autorizaciones temporales y que estarían vigentes hasta que desaparecieran las limitaciones por la covid.
En total, desde entonces, se han otorgado autorizaciones para la ampliación de 670 terrazas, buena parte de ellas en zonas de especial concentración de bares y locales de ocio: un centenar en el barrio de Russafa, 70 en la zona del Cedro, 68 en Ciutat Vella, 67 en el entorno de la plaza de Honduras y 50 en Juan Llorens. Pero llegados a este punto, y especialmente tras las últimas medidas de desescalada aprobada por la Generalitat, en el consistorio creen que es momento para volver a la normalidad, también en la ocupación del dominio público.
En este sentido, explican fuentes de la concejalía de Beamud, "la situación ha cambiado bastante": el aforo de los locales se amplía hasta el 75% en el interior, y las terrazas ya tienen permitido el aforo completo, además de que se ha eliminado la restricción horaria para estos negocios, ya hace tiempo que no hay toque de queda, y se vuelve a permitir el consumo en las barras, aunque sentados los clientes.
Asimismo, el avanzado estado del plan de vacunación de la Conselleria de Sanidad en el territorio valenciano hace prever que se vayan eliminando más restricciones en las próximas semanas, con la mirada puesta en el 9 de octubre. Y el hecho de que muchas terrazas ampliadas se encuentren en "zonas tensionadas", según la concejalía, es "una razón extra" para que estas vuelvan a su estado normal, previo al estallido de la crisis del coronavirus.
En el encuentro que previsiblemente tendrá lugar este mismo viernes, el consistorio expondrá la decisión, a partir de la cual se podrá conversar acerca de cómo y cuándo se lleva a cabo esta 'desescalada' de terrazas.
En este sentido, la edil del ramo, Lucía Beamud, indica que con la decisión "se recupera espacio público que se había cedido de manera extraordinaria y temporal a los locales de hostelería". Por todo ello, además de congratularse por el acuerdo alcanzado el año pasado, señala que ha llegado el momento de que "esa medida extraordinaria llegue a su fin".
En las últimas semanas, la concejalía ha llevado a cabo "bastantes inspecciones de terrazas" y también se ha seguido desarrollando una campaña informativa para los locales de hostelería bajo el título 'Al carrer, com a ta casa' ['En la calle, como en tu casa'] que ha servido para hacer llegar con más eficacia a los negocios del ramo las normas que deben cumplir en cuanto a sus terrazas.
Lo cierto es que las asociaciones vecinales venían presionando al consistorio poner fin a la ampliación de las terrazas desde hace semanas. De hecho, en el último encuentro entre el Ayuntamiento y las diferentes partes implicadas, que tuvo lugar a principios de este mes, se acordó el mantenimiento de la medida y la Federación de Vecinos manifestó su desacuerdo porque, a su juicio, ya no había lugar "a mantener por más tiempo unas excepciones que se estableció debían ser temporales" porque "ya no existen restricciones para las terrazas".