ALICANTE. La crisis sanitaria provocada por la pandemia y la posterior espiral inflacionista iniciada con la rotura del tráfico de contenedores el pasado otoño (y agravada de forma exponencial por la inflación energética y la guerra de Ucrania) ha provocado profundos cambios en el mercado inmobiliario de la Comunitat Valenciana. Así lo evidencia el último Observatorio Inmobiliario de la promotora cotizada Aedas Homes (con fuerte presencia en la Comunitat), cerrado el pasado mes de diciembre y que por tanto no recoge el impacto de la invasión rusa.
Según los resultados del observatorio, a los que ha tenido acceso Alicante Plaza, la situación económica y sanitaria ha provocado que el 52% de los valencianos que estaban pensando en adquirir una vivienda hayan pospuesto sus planes. No solo eso, el 14% de los encuestados asegura que directamente ha "cancelado totalmente" los planes de comprar un inmueble. Así, solo uno de cada tres valencianos (el 34%) que estaba valorando adquirir una vivienda sigue adelante con su idea pese a la crisis.
Hay notables diferencias entre los datos de la Comunitat Valenciana y la media nacional, que parecen indicar que la crisis ha impactado de forma más acusada en la región o que, al menos, los valencianos son más precavidos que el resto del país a la hora de afrontar una inversión tan importante como la compra de una vivienda. Así, en España son un 42% los que siguen adelante con sus planes de adquirir un inmueble pese a la crisis, ocho puntos más. El 47% admite que ha pospuesto la inversión (cinco puntos menos) y la han cancelado totalmente un 11% de los encuestados (tres puntos menos).
Por otra parte, la vivienda es una de las grandes protagonistas del plan de fondos europeos de reconstrucción tras la pandemia Next Generation, tanto para la obra nueva como para la rehabilitación. En este sentido, un 41% de la población de los valencianos encuestados está estudiando o ya ha decidido solicitar estos fondos, según el observatorio de Aedas. El 74% de los encuestados considera que el precio de la vivienda se incrementará el próximo año (es decir, en 2022, pues los datos son de diciembre pasado) y un 69% considera que el alquiler es solo una opción temporal. La preferencia por la vivienda en propiedad se sigue imponiendo, de una forma muy similar a la del resto del país (68,3%).
En cuanto a las nuevas tendencias que definen los hogares postpandemia, el nivel de digitalización en el hogar alcanza el 4,1 en la Comunitat Valenciana, frente al 3,8 del observatorio de junio. Los hogares más digitalizados son los del grupo de edad de 25 a 35 años (4,5 puntos), pero en general las viviendas valencianas están más digitalizadas que la media, que en España alcanza el 3,7. Algunos de los indicadores que miden este nivel de digitalización son el uso de cerraduras inteligentes, la existencia de una red social entre los vecinos, los puntos de carga de vehículos eléctricos, la frecuencia de uso de un asistente por voz o de un robot aspirador, la domótica del hogar o el uso del canal 100% online para alquilarla o comprarla.
Asimismo, en cuanto al nivel de sostenibilidad, la Comunitat Valenciana alcanza el 8,1 (dos décimas más que en junio de 2021), y en este caso la mejor puntuación la alcanza el grupo de mayor edad (51 a 65 años) con un 8,4. La media española se sitúa en el 7,9, lo que parece indicar que los compradores de vivienda valencianos están más sensibilizados que la media con la sostenibilidad de la vivienda. Entre los factores más valorados para considerar sostenible una vivienda se cuentan que esté aislada acústicamente, que tenga luz natural, o que cuente con electrodomésticos eficientes.