VALÈNCIA. Taxistas y VTC se sientan a negociar con la Generalitat Valenciana los últimos flecos del decreto que regulará la prestación de servicios por parte de los vehículos con conductor. Representantes de los dos sectores pasarán por la Conselleria de Vivienda este martes para reunirse con el director general de Transporte y Movilidad, Carlos Domingo.
En primer lugar, Transporte se reunirá con el sector del taxi para más tarde abordar el asunto con las empresas que prestan servicios con licencias VTC, lideradas por la patronal Unauto. Este lunes ya hubo una reunión técnica en el ámbito de la Conselleria para preparar el borrador de decreto que este martes les presentará la Generalitat. "Se trata de establecer unas reglas de juego donde haya un espacio común tanto para el taxi como para los VTC porque están prestando un servicio parecido, uno que hasta ahora ha estado muy regulado, y el otro que no está tan regulado", señalaba la pasada semana la consellera, MªJosé Salvador.
Las asociaciones del taxi de la Comunitat Valenciana presentaron el pasado miércoles a la Generalitat un escrito con sus propuestas para regular los VTC, entre las que planteaban la obligación de un mínimo de 12 horas de precontratación y la prohibición de que circulen libremente para captar clientes. Lo hacían en el marco de la consulta pública organizada por la Conselleria para realizar la nueva normativa, que desde Vivienda acabarán de definir junto con taxis y VTC en estas reuniones.
Lejos de la postura del sector del taxi se encuentran las propuestas de Unauto -representante de Uber y Cabify principalmente-, quien está de acuerdo con que el taxi sea el único que mantenga la contratación inmediata en la calle. Sin embargo, no lo está con las 12 horas de precontratación que piden los taxistas.
De hecho, Unauto pide que el taxi tenga un precio libre de precontratación, además de flexibilización horaria para el taxi. Entre sus recomendaciones también aparece la eliminación de los requisitos de los vehículos no relacionados con criterios de seguridad, como requisitos de longitud y caballaje de los VTC.
En las peticiones en referencia a los dos sectores se encuentran que tanto taxi como VTC puedan hacer viajes compartidos, más conocido como carpooling. Además, piden poder utilizar carriles dedicados para los transportes urbanos de servicio público, como el carril bus. También solicitan más control para el taxi, como implantar un registro electrónico a través del taxímetro o igualar los regímenes fiscales a estimación directa.
En Madrid, la normativa acordada entre la comunidad autónoma y el ayuntamiento obligará que estos coches estén a una distancia mínima de entre 300 y 500 metros del cliente que contrata sus servicios, mientras que en Barcelona la propuesta de limitación es un plazo de precontractación de 15 minutos, medida que ha llevado a empresas que trabajan con Uber y Cabify en la ciudad a plantear expedientes de regulación de empleo. Mientras, algunas asociaciones de taxi no ven válidas estas soluciones al entender que es difícil controlar su cumplimiento.
En Barcelona, la regulación también ofrece la posibilidad a los ayuntamientos para ampliar la precontratación a una hora en base a circunstancias de dominio público viario, gestión del tráfico urbano, protección del medio ambiente y prevención de la contaminación atmosférica.
Además, el Govern habilitará un registro de VTC donde las empresas del sector deberán darse de alta e informar de los servicios que están prestando sus vehículos diariamente, así como del origen y destino de los trayectos. La geolocalización de la aplicación tampoco podrá estar activa hasta que se haya contratado el servicio.
Mientras, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) instaba hace unas semanas a los gobiernos regionales a desarrollar "a la mayor brevedad posible" una normativa autonómica que garantice que el servicio de vehículos de alquiler con VTC "se siga prestando en el futuro".
La CNMC, que realizó estas propuestas en el informe sobre el decreto de Fomento, sugiere levantar la actual limitación legal de un VTC cada 30 taxis, una ratio que actualmente ya se ha sobrepasado en la mayoría de comunidades. Competencia, que aboga por la liberalización casi completa del sector, también pide "flexibilizar" el taxi, "eliminando restricciones que impiden mejorar su servicio" y "evitar discriminaciones" entre este transporte y los VTC en cuanto a los requisitos que tengan que cumplir en materia de horarios, calendarios, tipo de vehículo, circulación y estacionamiento.