Según las investigaciones presuntamente cambiaba los relojes por otros de menor valor y se quedaba con la diferencia en metálico
VALENCIA. Alfonso Grau, el que fuera vicealcalde de Rita Barberá se enfrenta, además de a un cargo por cohecho, a otro por blanqueo de capitales. Tal y como ha podido saber Valencia Plaza de fuentes de toda solvencia, la magistrada del caso le acusa de cambiar los regalos que presuntamente recibía del empresario Urbano Catalán, director general de Viajes Transvia Tours, por otros de menor cuantía para quedarse la diferencia en metálico.
Según las investigaciones realizadas hasta la fecha los presentes supuestamente recibidos por Grau, casi todo relojes de alta gama, rondarían un valor total de 75.000 euros. Según fuentes cercanas al caso, Grau habría cambiado la mayor parte de esos regalos para quedarse con el dinero sobrante. La cantidad de dinero que se baraja varía entre el 25 por ciento de algunos relojes y el 50 de otros, pero nunca bajaría de los 20.000 euros.
El martes pasado, tanto Alfonso Grau como Urbano Catalán fueron citados por la magistrada del juzgado de Instrucción 19 para que prestaran declaración y, al igual que hicieran el día de su detención, ambos se acogieron a su derecho a no declarar ante la juez.
Los agentes del Grupo de Delitos Económicos de la Guardia Civil, tal y como informó este periódico el día de la operación, investigan varias concesiones que las áreas gestionadas por Grau otorgaron al grupo al que pertenece Catalán. Entre los contratos que se están examinando se encuentra el del Bus Turístic de Valencia, por el que la empresa Transvia no paga canon alguno sino que presta el servicio como agencia de viaje y los autocares son cedidos por otras empresas del grupo.
El pasado día 24, el concejal de Movilidad Sostenible de Valencia Giuseppe Grezzi informó que, “el consistorio valenciano ha dejado de ingresar en las arcas municipales alrededor de 7 millones de euros desde que en 1999 el gobierno local del PP regaló a Viajes Transvia, y desde 2012 también a Viajes Privilege, el servicio del Bus Turístic de la ciudad, puesto que Valencia no ha recibido ni un solo euro porque ninguna de ellas abonaba tasas”.
Grezzi también informó que pretende rescindir ambas autorizaciones y sacarlas a concurso público, aunque ello podría acarrear consecuencias económicas para el ayuntamiento puesto que deberá indemnizar a las dos empresas que actualmente realizan el servicio y que tienen autorización municipal hasta el año 2019.
Junto al Bus Turístic también se investigan otros contratos de áreas como Bienestar Social. Este es el caso del servicio de ejecución de fiestas y conmemoraciones para personas mayores con un presupuesto de 553.176,74 euros.