Hay locales a los que uno llega sin saber previamente que lo haría, y cuando está ahí y ve que aún quedan pequeños paraísos donde ofrecen platos con honestidad, sin alardes y sin sobreprecios, si algo tiene claro es que su deber es contarlo.
Corren tiempos en los que en Valencia tenemos restaurantes con gastronomías de cualquier parte del mundo. También son tiempos en los que, si nos dejamos llevar por lo primero que vemos, es muy fácil que acabemos con la sensación de que no era eso a lo que habíamos venido.
Por eso siempre les digo a mis amigos que Valencia está bien, mola, no te la acabas, pero que vale la pena salir, buscar la periferia, ir más allá. Más. El interior también existe. Aunque hoy me quedo en la costa, en la playa de l’Almardà, en Sagunto. En Casa Ruiz (Avda. de Italia, 76).
Casa Ruiz es el típico restaurante que ha crecido mirando al mar. Accedes a él por una calle asfaltada, avanzas unos metros, llegas a la barra, con dos pasos más te ves en mitad de la sala, ya con las mesas listas, sigues un poco y sales a la terraza, más mesas, sol, luz, aire limpio, el paraíso en forma de paisaje de litoral. Seguramente, esta descripción les haya recordado a algunos restaurantes del paseo de Neptuno, en la playa de la Malvarrossa. Sí. Pero eliminemos de la ecuación lo chic, la espectacularidad en la decoración, el brillibrilli. Ciñámonos a la comida.
En Casa Ruiz la cocina es mediterránea y marroquí y, sobre todo, auténtica, es decir, de recetas que pasan de generación a generación. La familia Ruiz Rochina abrió sus puertas en 1974, y dos décadas después, en 1998, las hermanas Teresa y Ana Ruiz Rochina, junto a su marido, Nour el Yakin Boukojaa tomaron las riendas y ampliaron la carta con parte del recetario tradicional de Marruecos. Y claro, cuando uno se hace una composición de todo esto que les acabo de contar, piensa en el cuscús y la paella, platos con sello de origen donde los haya.
Aquí, las elaboraciones con arroz son las indispensables y las raciones abundantes, como en casa: paella de pollo y conejo, de marisco, arroz a banda, arroz negro… Y lo mismo vale para los platos marroquíes: cous cous de cordero y de pollo (también ofrecen uno de bogavante) y, apunten este nombre, tajín ambrosía (de cordero) y que resulta ser un plato superior e inabarcable.
Hay más platos, más tapas, más pescado, más marisco, más que suficiente. No me digan que no les gustaría salir de Valencia y llegar hasta la playa de l’Almardà y sentarse a una de las mesas de Casa Ruiz y luego contar que han comido bien, sin sentirse engañados, y mirando al paraíso.
Avda. de Italia, 76, playa de l’Almardà, Sagunto
Telf. 962 60 81 89