VALÈNCIA (EP) El Consejo de Ministros ha aprobado este martes el proyecto de Ley Orgánica de Modificación de la Ley Orgánica de Educación (LOMLOE), una reforma elaborada por el Ministerio de Isabel Celaá que ya fue aprobada hace un año, el 15 de febrero de 2019, el mismo día que se produjo el adelanto electoral, lo que truncó su tramitación parlamentaria.
"Es la primera pieza de todo un proyecto educativo que va a tener un gran impacto transformador en el sistema educativo español, que se fundamenta en la excelencia y en la equidad", ha resumido Celaá en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. "Nadie puede quedar atrás, porque un país necesita el talento de todos", ha proclamado.
Según ha subrayado Celaá, la "enseñanza personalizada es el corazón" de la LOMLOE, que tiene entre sus principales objetivos evitar la "segregación del alumnado por razones socioeconómicas o de cualquier otra naturaleza", por lo que eliminará los itinerarios en Secundaria que trazó la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE).
La LOMLOE pretende derogar por completo la vigente LOMCE, aprobada en 2013 por el Partido Popular. La 'Ley Wert', como también es conocida la LOMCE, está cuestionada desde entonces por buena parte de la comunidad educativa. Su derogación ha sido prometida reiteradamente por el PSOE, y también es uno de los puntos del acuerdo de gobierno de coalición firmado por los socialistas y Unidas Podemos.
Celaá ha detallado algunas de las pretensiones de su reforma para cada etapa educativa. En ese sentido, ha hablado del "esfuerzo" que se destinará a la extensión de la Educación Infantil de 0 a 3 años. También a la evaluación por ciclos en Primaria para evitar el aumento de "repeticiones indeseables" en esta etapa, que cifra en un 15% tras la implantación de la 'Ley Wert'.
En Secundaria, "etapa crucial" en opinión de la ministra, se eliminará la "canalización de talentos", en alusión a los itinerarios introducidos por la LOMCE para los estudiantes cuando cumplen 13 años. "Donde había barreras establecemos una ancha avenida con distintos caminos que llevan a la titulación de Secundaria. Qué menos formación debe tener un español que la ESO", ha dicho Celaá marcando uno de los objetivos de su reforma: incrementar el porcentaje de titulados en Secundaria.
Celaá ha recordado que su reforma educativa pretende también devolver poder de decisión a los Consejos Escolares, fomentar la Formación Profesional, introducir el desarrollo sostenible en las aulas y transformar el actual currículo, que considera demasiado "enciclopédico y memorístico".
A preguntas de los periodistas, Celaá ha explicado que la asignatura de Religión será de "oferta obligatoria" y "asunción voluntaria", aunque no tendrá "asignatura espejo" como hasta ahora. Sobre la eliminación de los conciertos a centros privados que separan al alumnado por sexo, la ministra ha indicado "categóricamente" que se concertará "preferentemente" con los centros que no segreguen.
Asimismo, Celaá ha asegurado que la norma respeta "absolutamente" la Constitución y el artículo 3 de la misma, así como las sentencias del Tribunal Supremo en relación a la enseñanza del castellano. Concretamente, ha señalado que ley establece que al final de la enseñanza obligatoria todos los alumnos tengan conocimiento y capacidad de uso del castellano y de la lengua cooficial de su comunidad autónoma.
La ministra ha defendido que todos los centros sostenidos con fondos públicos asuman las necesidades que requieren más refuerzo del sistema. "No vamos a hacer avanzar a través de medidas proteccionistas a la educación en su conjunto, sino a través de inyecciones de calidad y toda la ley incorporar elementos de calidad potentes, robustos, para mejorar la educación en su conjunto, tanto la pública, como ese sector importante de concertada que acompaña y que se atiene a lo que significan los objetivos y consensos sociales", ha dicho.
En este sentido, ha apuntado que su proyecto de ley señala que las administraciones educativas velarán por la presencia equilibrada del alumnado con necesidad especifica de apoyo educativo entre todos los centros sostenidos con fondos públicos de su ámbito de actuación.
"Esta es una ley que busca la justicia o equidad, que es dar a cada uno lo que corresponde y esto no puede ser confundido con una resta de libertad. Al contrario, es libertad para todos, más allá de sus circunstancias", ha recalcado.
Por su parte, la ministra de Igualdad, Irene Montero, que también ha participado en la rueda de prensa posterior al Consejo, se ha limitado a remitirse a las palabras de la ministra de Educación al ser preguntada por su opinión sobre el tratamiento que la ley da a la asignatura de Religión y a los centros que separan por sexos.
El texto aprobado este martes es idéntico al que hace un año logró el visto bueno del Gobierno de Pedro Sánchez antes de disolver las Cortes. De este modo, la reforma evita pasar de nuevo por los órganos consultivos y llegará al fin al Congreso tras un año esperando iniciar su trámite parlamentario.
En el Congreso se debatirá en la Comisión de Educación y Formación Profesional, donde los grupos parlamentarios podrán presentar enmiendas al texto y postergar durante meses su definitiva aprobación, que requiere de mayoría absoluta, con el apoyo de 176 diputados, mientras PSOE y Unidas Podemos, socios de Gobierno, suman 155.
En las últimas semanas, la ministra de Educación, liberada en este nuevo Ejecutivo de la Portavocía del Gobierno, ha apretado su agenda para recibir a responsables educativos de casi todas las comunidades autónomas, también a sindicatos docentes, patronales de la educación concertada o asociaciones de padres y madres, con el objetivo de detallarles el contenido de su reforma educativa, también bautizada como 'Ley Celaá'.
Tras asumir la cartera en junio de 2018, Celaá señaló como una cuestión "urgente" acabar con los aspectos más "lesivos" de la LOMCE. La reforma educativa de la ministra Celaá pasó de ser una modificación puntual de la 'Ley Wert', como anunció durante sus primeros meses al frente de Educación, a una derogación completa que retrocede hasta la socialista Ley Orgánica de Educación (LOE) de 2006 con una renovación de su articulado.
Si tiene hijos en edad escolar, échese a temblar. Este curso entra en vigor la ‘ley Celaá’. Despídase de una enseñanza que prime el esfuerzo y el conocimiento. Esto es lo que le espera: la educación como parque temático, el adoctrinamiento en las aulas y el triunfo de los mediocres