MADRID (EP). El Tesoro Público ha colocado este jueves 3.448,45 millones de euros en bonos y obligaciones durante la penúltima subasta del año, dentro del rango medio previsto, y lo ha hecho cobrando menos a los inversores en el bono a cinco años y elevando el interés ofrecido en las referencias a 10 y 30 años.
La demanda conjunta de las tres emisiones ha superado ampliamente los 5.000 millones de euros, lo que demuestra el interés de los inversores por las títulos de deuda pública española en la penúltima subasta del año antes de cerrar el calendario el próximo martes día 10 de diciembre, ya que la puja programada para el día 12 no ha sido finalmente convocada.
En concreto, el organismo dependiente del Ministerio de Economía y Empresa ha captado 1.622 millones de euros en el bono a cinco años, frente a una demanda que ha superado los 2.400 millones, y el interés marginal se ha situado en el -0,064%, menos negativo que el -0,101% de la subasta previa celebrada el 21 de noviembre.
En la obligación a 10 años el Tesoro ha colocado 1.316,41 millones, por debajo de las peticiones por importe de 1,951 millones, y la rentabilidad marginal se ha elevado hasta el 0,449%, por encima del 0,414% de la emisión del pasado mes.
Por último, el organismo ha recibido una demanda de 830 millones de euros para la obligación a 30 años y ha colocado 510 millones, mientras que el interés marginal se ha situado en el 1,332%, también superior al 1,018% de la subasta del pasado 3 de octubre.
Tras la emisión de este jueves, el Tesoro sólo celebrará una subasta más este año, el próximo 10 de diciembre, puesto que no ha convocado finalmente la emisión de bonos y obligaciones prevista para el jueves día 12 de diciembre, ya que, tal y como ha sucedido en otras ocasiones, se establece en el calendario a principios de año, pero se decide su convocatoria o no en función de las necesidades, según han explicado a Europa Press en fuentes del Ministerio de Economía.