VALÈNCIA. Varios consejeros de Ebro Foods han aprovechado estos días las llamadas 'ventanas temporales' -opciones que tienen para operar en bolsa los consejeros de las cotizadas españolas- para comprar acciones de la que es líder mundial en el sector del arroz. Y, entre ellos, aparece el valenciano (de adopción) José Ignacio Comenge Sánchez-Real, que ha adquirido 84.034 acciones más durante la última semana desembolsando un montante total -corretajes al margen- de 1,46 millones de euros, según lo ha podido constatar este diario de la base de datos pública de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Así, el pasado 2 de noviembre compró 31.370 títulos de la cotizada presidida por Antonio Hernández Callejas a 17,38 euros por acción; tres días después fueron 40.000 más a 17,37 euros; y en la siguiente sesión, la del 6 del mes en curso, 12.664 más a 17,26 euros. De este modo, el que fuera fundador de la extinta embotelladora valenciana de Coca-Cola (Colebega) controla ya el 3,23% del capital de Ebro Foods, lo que teniendo en cuenta el cierre de ayer en bolsa (17,46 euros) asciende a casi 87 millones de euros.
Pero Comenge no ha sido el único consejero en aumentar la participación en el capital de la cotizada madrileña. Ahí están la Corporación Financiera Alba y Damm, que han elevado su participación en Ebro Foods y se sitúan por encima del 13% y del 11,6% respectivamente. En concreto, el brazo inversor del Grupo March (Alba) ha declarado una participación del 13,24%, equivalente a un total de 20,38 millones de acciones, valoradas en más de 358 millones de euros, y que le sitúa como segundo accionista de la firma de alimentación por detrás de la familia Hernández, que controla el 15,92% de la compañía.
Por su parte, el grupo cervecero Damm ha aumentado su presencia del 11,5% al 11,68% actual, equivalente a un total de 17,9 millones de títulos, que están valorados en 315 millones de euros, según los precios actuales del mercado.
Entre los principales accionistas de Ebro Foods figuran la familia Hernández, que ostenta un 15,92% de la compañía a través de Grupo Tradifin y Hercalianz Investing Group (con un 7,96% cada una), seguida de Corporación Financiera Alba (13,24%), Damm (11,68%), Corporación Económica Delta (11,50%), la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), que posee el 10,36%, y Empresas Comerciales e Industriales Valencianas -de los herederos de Juan Luis Gómez-Trenor-, con el 7,82%.
Mientras tanto Ebro Foods encadenaba ayer la tercera subida consecutiva en bolsa -y la séptima de las últimas nueve sesiones- reduciendo su pérdida anual hasta el 6,66% y una capitalización de 2.726 millones de euros. Todo ello después de presentar sus cuentas de los nueve primeros meses del año -el pasado 24 de octubre-, que arrojaron una caída del beneficio del 22% hasta los 99,7 millones de euros.
La compañía explicó que se vio muy afectadas por la inflación de unos costes generales para todo el mercado y otros propios y extraordinarios, como el sufrido en el negocio arrocero norteamericano, además de las importantes inversiones acometidas para el desarrollo del plan de expansión del grupo.
Por su parte, la cifra de ventas consolidada del grupo se elevó un 5% a septiembre, hasta alcanzar los 1.922 millones de euros, pese a la bajada del tipo de cambio del dólar, que supone un impacto negativo de 42 millones de euros. Por su parte, el beneficio bruto de explotación (Ebitda) se redujo un 8,1%, hasta los 211,5 millones de euros.
Finalmente la multinacional precisó que los diversos efectos de carácter extraordinario acaecidos durante el ejercicio impactaron "muy negativamente" sobre su estructura de costes; mientras que destacó la positiva evolución de las marcas y la acogida de los nuevos productos, que muestran el buen fondo de salud del negocio.